España

Los presos de ETA exigen ayudas a Sánchez para los familiares que murieron en carretera por ir a verles

La asociación de familiares de presos de ETA, Etxerat, ha exigido al Gobierno de Pedro Sánchez el acercamiento de todos los presos a Euskadi «sin contrapartidas». Así lo ha trasladado el portavoz de la asociación, Urtzi Errazkin, además de afirmar que en 2020 se excarcelará a 17 presos con penas íntegramente cumplidas, pero ascenderían a 85 «si se les aplicara la ley ordinaria», sin «excepcionalidad».

Su pretensión, además, es que haya un «reconocimiento institucional como víctimas de la dispersión» de los 16 familiares que han fallecido en todos estos años en las carreteras cuando iban a ver a los reclusos a las cárceles porque, es esta forma, «no se podrá mantener la política de alejamiento y no se repetiría una política tan vengativa como esta».

En declaraciones a Europa Press, el representante de la asociación de familiares de presos de ETA ha asegurado que el 80% de los presos de la banda que se encuentran en centros penitenciarios españoles (son un total de 210) están recurriendo que se les mantenga en primer grado o régimen cerrado (con medidas de control más restrictivas), cuando hasta ahora se negaban a hacerlo.

De esta forma, serían alrededor de 170 los que están recorriendo el camino para que se les pueda aplicar el segundo grado (ordinario) y piden realizar actividades de trabajo o formación, como exige la Ley para poder progresar de grado.

Errazkin ha admitido que el propio recluso «tiene que dar ciertos pasos», pero ha afirmado que, cuando se habla de acabar con el alejamiento, «ahí no hay ninguna contrapartida» que exigir. «Los presos tienen que estar lo más cerca posible de su entorno familiar y cultural», ha manifestado.

A su juicio, al igual que hace 30 años el Gobierno decidió, «unilateralmente, mover a estos presos y alejarlos, podría hacer exactamente lo mismo en sentido contrario porque es una medida que vulnera derechos humanos».

Urtzi Errazkin ha asegurado que, por tanto, «lo primero y más urgente» es el acercamiento «sin contrapartidas», porque se trata de «una condena» para los familiares, así como la puesta en libertad de los reclusos enfermos «para curarse, no solo para dejarles morir».

El portavoz de Etxerat ha destacado que el 66,3% de los presos de ETA en el Estado español se encuentran entre 600 y 1.100 kilómetros de distancia de sus lugares de origen, por lo que sus familiares «tienen que viajar entre 1.200 y 2.200 kilómetros para estar 40 minutos con su familiar.

Urtzi Errazkin ha indicado que la mayoría de presos de ETA «siguen estando en primer grado sin ningún razonamiento jurídico», lo que supone «el escollo más grande». En esta línea, ha remarcado que, si se aplicara la legislación ordinaria, en 2020, «en lugar de salir 17 presos con la condena completamente cumplida, saldrían 85 presos con libertad condicional porque ya tiene las tres cuartas partes de la condena cumplida».

El portavoz de la Asociación de familiares de presos de ETA cree que «sería interesante» que el Gobierno de Pedro Sánchez hablara con Etxerat con el fin de conocer cuáles son sus intenciones sobre los reclusos y escuchar sus planteamientos.

Urtzi Errazkin ha recordado que ya hace años y medio que Pedro Sánchez llegó al Gobierno e hizo una declaraciones «muy optimistas» sobre un cambio en política penitenciaria. A su juicio, ha llegado el momento de «pasar de las palabras a los hechos». Ha admitido que están «más esperanzados, pero con los pies en el suelo y sin hacerse demasiadas ilusiones». En esta línea, ha manifestado que, cuando accedió al Ejecutivo el líder del PSOE hace un año y medio, «creó unas expectativas y unas ilusiones en los familiares que no se han traducido en nada».