El PP pide tiempo a C’s pero teme que haya pactado con el PSOE echar ya al presidente de Murcia

El Partido Popular ha pedido a Ciudadanos a través de su secretario general, José Manuel Villegas, que posponga el debate de la moción de censura en Murcia hasta después de Semana Santa. Sin embargo, la respuesta de los de Rivera no ha convencido a los populares. Estos temen que el partido naranja no aguante la presión y pueda apoyar a los socialistas.

En el PP sospechan que podría haber un acuerdo entre C´s y el PSOE para que estos gobiernen un máximo de 6 meses tras los cuales se convocarían unas nuevas elecciones en Murcia.

Los populares solicitan a los de Rivera que pospongan el debate de la moción, en tanto en cuanto, según los estatutos murcianos, no existe un plazo máximo de tiempo estipulado para que éste se desarrolle, aunque sí un mínimo. Cinco días deben pasar antes de que se celebre. Este es el plazo que barajan los socialistas, lo que llevaría a debatir la moción de censura a Pedro Antonio Sánchez el jueves de esta misma semana.

Según fuentes conocedoras de estas negociaciones, los de Rivera aseguran «sentirse muy presionados» y piden a los populares «que pongan algo de su parte para facilitar la situación».

Así las cosas, desde Génova miran con desconfianza a los de Rivera y ya se preparan para lo peor: que Sánchez sea desbancado de la Presidencia de Murcia y que los socialistas se hagan con el Gobierno de aquella Comunidad. Este es el peor de los escenarios para el PP que mantienen su confianza en que, finalmente, el presidente murciano será desimputado.

Hasta el momento los de Rivera han defendido la opción de presentar una moción de censura instrumental, esto es, disolver el Gobierno de Murcia e ir a elecciones. Desde el partido naranja se reafirman en esta postura asegurando que «son los murcianos los que deben decidir». Sin embargo, la presión del resto de grupos -fundamentalmente PSOE y Podemos- empieza a hacer mella en la formación que apoyó la Presidencia de Pedro Antonio Sánchez -a falta de un diputado para la mayoría absoluta-.

El PSOE está «echado al monte»

El coordinador general del PP, Fernando Martínez-Maillo, ha acusado este lunes al PSOE de Murcia de estar «echado al monte» y dispuesto a gobernar «por la puerta de atrás» y ha insistido en que la posición de la dirección del PP «en este momento» sigue siendo esperar a ver qué dice el juez sobre el caso del presidente regional, Pedro Antonio Sánchez.

Maillo se ha expresado así en rueda de prensa tras la reunión del Comité de Dirección del partido, después de que la Asamblea de Murcia haya admitido a trámite la moción de censura registrada por el PSOE para intentar derribar el Gobierno de Sánchez, investigado por el TSJ en el ‘caso Auditorio’.

El dirigente nacional, además de insistir en que el PP no considera que éste sea un caso de corrupción —»podrá haber alguna irregularidad administrativa pero no falta un euro de dinero público en el famoso auditorio», ha dicho—, se ha preguntado qué autoridad tendría un hipotético sustituto de Sánchez si luego el juez archiva la causa.

Garzón en contra de Podemos, a favor de C´s

El coordinador federal de Izquierda Unida (IU), Alberto Garzón, ha reiterado este lunes que la postura de su formación no es la de Podemos en la propuesta de moción de censura del PSOE contra el presidente dela Región de Murcia, el ‘popular’ Pedro Antonio Sánchez. Según el líder de IU, la situación «tan putrefacta» que se vive en Murcia hace necesaria la convocatoria de elecciones anticipadas antes que buscar una acuerdo de Gobierno con el PSOE que ha considerado «precipitado».

«Desde hace dos meses anunciamos que, dado el panorama, lo más razonable era convocar elecciones. Ahora con toda la información de la corrupción del PP encima de la mesa reafirmamos nuestra posición», ha señalado Garzón en una rueda de prensa.

Garzón ha señalado que la diferencia con respecto a la posición de Podemos, que al contrario de IU es más próximo a buscar una mayoría alternativa, se trata de una disensión natural en un espacio político heterogéneo. Así, el coordinador de IU ha reafirmado que la situación es «putrefacta y de suficiente gravedad» como para que sea la ciudadanía la que se exprese en las urnas «en lugar de buscar un acuerdo precipitado».