España
Covid en la Policía

Mutuas médicas que trabajan para Interior niegan PCR a policías contagiados de Covid

Varios agentes del Cuerpo Nacional de Policía denuncian el incumplimiento reiterado del propio Plan de actuación contra la pandemia revisado por el ministerio a finales del año pasado.

  • Alfonso Egea
  • Jefe de Investigación en OKDIARIO. Anteriormente fui responsable de la sección de Actualidad y Sucesos en Espejo Público, en Atresmedia. He publicado cuatro libros y actualmente colaboro en programas de televisión en Mediaset y en Telemadrid. Agradecido por tener el reconocimiento de la Policía Nacional de Madrid y la medalla al mérito de la Guardia Civil.

Los últimos casos escandalizan: un agente estuvo 10 días aislado y al volver no le practicaron la prueba. A los dos días tenía una intervención programada y en el preoperatorio dio positivo. Otros dos agentes tuvieron que recurrir a pagarse sus propias pruebas. A uno de ellos se lo denegaron y el otro dio positivo asintomático antes de reincorporarse. Mientras el secretario de Estado de Seguridad, Rafael Pérez Ruiz, aseguraba hace solo unas horas que los policías y los guardias civiles serán los próximos colectivos en vacunarse tras los sanitarios y los mayores de 80 años, OKDIARIO ha recibido la queja de varios agentes de policía que documentan un deficiente seguimiento de los positivos que se están produciendo dentro del cuerpo con lo que se baja la guardia en las medidas de prevención de contagios del Covid.

No es la primera vez desde que arrancó la pandemia que las Fuerzas y cuerpos de Seguridad del Estado denuncian una aparente desatención por parte de su ministerio a la hora de protegerlos del Covid y de sus consecuencias, sin embargo, el último capítulo que se está escribiendo en este sentido es preocupante por su relato pero también por sus posibles consecuencias: la negativa de mutuas médicas que atienden a las plantillas policiales dependientes de Interior de practicar pruebas PCR, las más fiables, a aquellos agentes que tienen que volver al servicio después de que hayan resultado positivo en el virus. Este diario ha tenido conocimiento de algunos casos que según fuentes policiales representan algunas situaciones que están empezando a ser habituales.

En el primero de ellos un agente se contagió del virus el mes pasado. El protocolo sanitario ahí es inflexible porque policía o no un positivo en Covid se rige por las mismas normas que toda la población: aislamiento inmediato y baja laboral durante 10 días. Los días van pasando y el agente en cuestión decide volver a contactar con servicios médicos de su jefatura ante el temor de reincorporarse a la actividad policial sin saber si sigue dando positivo en Covid. El responsable médico de la jefatura en cuestión comprende lo razonable de la petición y prescribe una prueba PCR para que la agente regrese con sus compañeros sin temor a contagios. La sorpresa llega con el documento al que ha tenido acceso OKDIARIO: la mutua médica le deniega la práctica de una prueba diagnóstica prescrita por los servicios médicos del cuerpo policial. El documento en cuestión viene a decir que no tiene esa cobertura y que el criterio médico para prescribirla no justifica su práctica.

Positivo asintomático

Obviamente, el policía en cuestión se pagará la prueba de su bolsillo. Y más le vale, sobre todo si atendemos al siguiente caso, el de otro policía cuyo recorrido es idéntico al anterior: contagio, aislamiento, baja y regreso al cuerpo. No hay prueba ni por parte de los servicios médicos ni de la mutua. Se paga un PCR. ¿Resultado? Positivo asintomático.

Respuesta de la mutua médica a un policía al que el médico del cuerpo le prescribió una prueba PCR tras contagiarse de Covid.

Pero antes de seguir relatando casos en los que no se está velando por controlar la propagación del virus dentro de los cuerpos policiales es importante revisar un documento: Resolución del 3 de noviembre de 2020, con membrete del Ministerio del Interior y firmada por el director general de la Policía, Francisco Pardo Piqueras, por la que se actualiza el plan de actuación contra el Covid-19. En el epígrafe que se titula “Seguimiento y gestión de los contagios y los contactos en el ámbito de la Dirección General de la Policía” se indica textualmente: “De manera complementaria a la actividad de las autoridades competentes de Salud Pública, por parte del Área Sanitaria de la División de Personal, tanto a nivel central como periférica, se realizarán actuaciones de seguimiento de contagios entre contactos estrechos en el ámbito laboral, mediante la utilización de test rápidos de detección de antígenos, PCR o test de detección de anticuerpos, en función de lo que proceda.” En función de lo que proceda. ¿Quién decide lo que procede? Deberían ser los servicios médicos policiales los que lo decidieran. Pues lo hacen, pero las mutuas no lo ven conveniente.

Queda por contar un último episodio, muy revelador, de que el seguimiento de los casos positivos en la Policía deja bastante que desear. Otro agente dio positivo en Covid. A casa, aislado y de baja. Acabado el proceso habitual se reincorpora sin que los servicios médicos ni las mutuas de salud intervengan en el seguimiento al no creer necesarias nuevas pruebas de diagnóstico. Al poco de incorporarse el agente tenía que someterse a una intervención quirúrgica y desde que estamos en pandemia todas las operaciones vienen precedidas de un diagnóstico Covid. ¿Resultado? Positivo. Ante este panorama los representantes laborales de los policías se preguntan que para qué sirve un protocolo si uno de los puntos clave, que es el seguimiento de los contagios, depende de que las mutuas médicas autoricen o no los diagnósticos.