Iglesias «poda» los parquímetros pero no a los «presos políticos de Venezuela»

Pablo Iglesias ha vuelto al Hormiguero de Pablo Motos para seguir con su incansable campaña electoral. En esta ocasión, el líder de Podemos tuvo la ocasión de podar un árbol lleno de ramas con letreros con cuestiones de índole política y social.

Aprovechando la ocasión, Iglesias no se cortó a la hora de deshacerse de la Monarquía, de la amnistía fiscal, de la ley mordaza, de las SICAVS, incluso de los parquímetros, pero lo que quedó bien arraigado en el árbol del Hormiguero es la prisión para los presos políticos venezolanos.

Algo de sentido tiene que el líder de Podemos no condene los encarcelamientos de presos políticos en Venezuela por sus ideas contrarias al régimen chavista, ya que como informa OKDIARIO, Hugo Chávez firmó personalmente la concesión de 6,7 millones de dólares a Juan Carlos Monedero, Jorge Verstrynge y Pablo Iglesias para “llevar la Revolución a España y luchar contra el capitalismo”, a través de su Fundación CEPS.

No es la primera ocasión en la que el líder de Podemos rechaza condenar la prisión para los presos venezolanos, incluso Lilian Tintori, mujer del preso Leopoldo López, ha denunciado en reiteradas ocasiones la falta de empatía y de compromiso por parte de la formación morada.

Pablo Iglesias es el abanderado de la liberación de presos políticos españoles como del etarra Arnaldo Otegi, del que siempre dijo que «no debería estar en la cárcel» y del que celebró su libertad públicamente.

También pide abiertamente la liberación de, Andrés Bódalo, el concejal encarcelado por pegar una paliza a un concejal socialista, sin embargo, cuando se tratan de presos políticos venezolanos la cosa cambia, ya que Iglesias rehusa cualquier tipo de condena a los presos por ideología contraria al régimen que financia a la formación morada.

«Quiero quitar el encarcelamiento de Andrés Bódalo, es una vergüenza que Gómez de la Serna esté en el Parlamento, que a Rodrígo Rato le reciba el ministro del Interior, y que un jornalero que lleva trabajando desde los diez años tenga que pasar tres años y medio en prisión. Un saludo desde aquí a su hija Lorena que me ha escrito hoy y ojalá Andrés Bódalo esté libre muy pronto».