España

Ciudadanos expulsa a los tres diputados ‘díscolos’ que votarán ‘no’ a la moción en Murcia

Isabel Franco, Valle Miguélez, y Francisco Álvarez han sido expulsados de Ciudadanos. Los tres ex diputados de la formación naranja iban a apoyar una moción de censura de su partido junto al PSOE en Murcia, pero finalmente han decidido mantener su apoyo al popular Fernando López Miras.

Precisamente hoy han tomado posesión de sus nuevos cargos. Isabel Franco sigue siendo vicepresidenta, Miguélez sustituirá a la coordinadora autonómica del partido, Ana Martínez Vidal, como consejera de Empresa, Industria y Portavocía, y el nuevo consejero de Empleo, Investigación y Universidades, será Francisco Álvarez.

Hoy también ha tomado posesión Antonio Sánchez Lorente como nuevo consejero de Transparencia, hasta ahora era secretario general de la Consejería de Mujer, Igualdad, Lgtbi, Familias y Política Social. Este último no era diputado y, por tanto, no votaba en la moción.

Los tres diputados de Ciudadanos nombrados consejeros del Gobierno de Murcia han sido expulsados por su decisión que hará fracasar la moción de censura de los de Inés Arrimadas y los de Pedro Sánchez contra la coalición que el PP tenía con el partido naranja.

De ello han informado fuentes de Cs mientras se celebraba la primera reunión de trabajo de las comisiones naranja y del PSOE para detallar los contenidos del programa de gobierno que presentarán en la moción de censura que va a debatirse la próxima semana en la Asamblea Regional de Murcia.

El portavoz del PSOE murciano, Francisco Lucas, también diputado autonómico, y el de Cs en el Parlamento regional, Juan José Molina, que forman parte de esos equipos, han coincidido al indicar que el PP «ha comprado a tres tránsfugas incumpliendo tanto el Pacto Antitransfuguismo como su propio código ético», por lo que los 45 diputados murcianos deberán elegir entre «corrupción o regeneración y dignidad».

«Que nos quede claro que toda la ciudadanía nos está observando. Nosotros lo decidimos con nuestro voto, y la historia y la región nunca lo van a olvidar», ha afirmado Lucas.

Molina ha apuntado que habrán de «levantarse y decir de viva voz si quieren ser cómplices o acabar con este Gobierno que compra voluntades a plena luz del día, sin cortarse, y limpiar las instituciones para hacer de la de Murcia una región democrática, limpia y nueva, que es lo que quieren todos los murcianos».

En un comunicado conjunto, los promotores de la moción sostienen que «la corrupción está mostrando su lado más oscuro en la región en la que se urdieron los casos Auditorio, Tótem, Umbra, Púnica, Barraca, Biblioteca, Camelot, La Sal, Novo Carthago, Desaladora, Valley o La Zerrichera, por citar solo la punta del iceberg de este sistema arraigado en 26 años de gestión del PP».

A estos casos suman el que denominan «vacunagate», «tal vez el más doloroso, porque juega con las vidas de las personas y no solo con dinero público, y por el que se han comprado esos votos para evitar que se supiera qué cargos, allegados y familiares del PP se han vacunado de forma irregular», añaden.