Economía
Vivienda

Un experto lo aclara: así es cómo puedes ayudar a tus hijos a comprar una casa

  • Janire Manzanas
  • Graduada en Marketing y experta en Marketing Digital. Redactora en OK Diario. Experta en curiosidades, mascotas, consumo y Lotería de Navidad.

En julio, la compraventa de viviendas en España experimentó un notable incremento del 19,4% en comparación con el mismo mes del año anterior, alcanzando un total de 57.302 transacciones. Este aumento marca el nivel más alto desde septiembre de 2022 y el mejor resultado para un mes de julio en los últimos 17 años, según el Instituto Nacional de Estadística (INE). Este repunte se produce tras descensos en mayo y junio, impulsado en parte por la reciente reducción de los tipos de interés por parte del Banco Central Europeo (BCE), lo que ha facilitado el acceso a hipotecas más asequibles.

Las operaciones de compraventa se han visto favorecidas tanto en el sector de viviendas nuevas, que aumentaron un 38,6%, como en el de viviendas de segunda mano, que creció un 15,5%. En términos de tipo de vivienda, la gran mayoría de las transacciones fueron de viviendas libres, que representaron el 92,1% del total. Aunque las cifras generales para los primeros siete meses de 2024 muestran una ligera caída del 1,3%, se prevé que la segunda mitad del año traiga un aumento en la actividad, favorecida por las condiciones hipotecarias más flexibles. Por comunidades autónomas, Andalucía, la Comunidad Valenciana y Cataluña lideraron las transacciones en el mes de julio.

Consejos para ayudar a tus hijos a comprar una casa

La adquisición de una vivienda se ha convertido en un tema crítico, especialmente para los jóvenes en España, quienes enfrentan dificultades ante el constante aumento de precios. Gonzalo Bernardos, economista y profesor de la Universidad de Barcelona, ha abordado este asunto en sus redes sociales, señalando que el mayor obstáculo no es la cuota hipotecaria, sino la necesidad de contar con ahorros para cubrir aproximadamente el 30% del precio de la vivienda, que normalmente no lo financia el banco.

Bernardos sostiene que, en la actualidad, es más conveniente comprar que alquilar, ya que en muchas capitales de provincia el precio del alquiler es superior a la cuota del préstamo hipotecario. A este respecto, ofrece consejos para que los padres puedan ayudar a sus hijos a acceder a la compra de un inmueble. Si los progenitores cuentan con ahorros, les sugiere cuatro opciones: realizar una donación, otorgar un préstamo sin intereses, comprar la vivienda conjuntamente o permitir que el hijo adquiera el usufructo mientras ellos conservan la nuda propiedad.

Por otro lado, si los padres no disponen de suficientes fondos, recomienda considerar alternativas como ofrecer una doble garantía hipotecaria o actuar como avalistas, aunque advierte que estas opciones pueden ser arriesgadas. Las reflexiones de Bernardos han generado un amplio debate en las redes, con seguidores que resaltan la diferencia entre alquilar y comprar, destacando que, aunque ambas opciones implican gastos, la compra permite amortizar parte del costo.

Aval bancario

El aval hipotecario actúa como una garantía adicional que bancos y entidades financieras requieren cuando consideran que el solicitante de un préstamo podría enfrentar dificultades para devolver el dinero.

Este tipo de aval puede ser material, como un inmueble o ahorros, o personal, es decir, alguien que se compromete a respaldar al deudor. En el caso de un aval personal, se solicita que la persona que actúa como avalista presente la misma documentación que un solicitante de hipoteca, lo que incluye la justificación de sus ingresos y la declaración de deudas.

El rol del avalista es fundamental, ya que se hace responsable de la deuda si el deudor no cumple con los pagos. Si el avalista no paga, puede ser incluido en listas de morosidad o, en casos extremos, perder bienes. Por este motivo, es crucial que el avalista evalúe la capacidad financiera del deudor antes de asumir este compromiso.

Según el Banco de España, el aval hipotecario es un contrato donde el avalista garantiza el cumplimiento de una obligación. Si el deudor no puede cumplir, el avalista se hace cargo con todos sus bienes. Es importante destacar que la figura del avalista suele solicitarse cuando el solicitante es joven o su perfil crediticio presenta riesgos.

En cuanto a la posibilidad de conseguir una hipoteca al 100% con aval, hoy en día es poco común debido al alto riesgo financiero que implican. Aunque existen algunas excepciones, la mayoría de las entidades prefieren prestar menos del 80% del valor de la vivienda.

Incluso sin nómina, es posible solicitar una hipoteca con aval, aunque las probabilidades de aprobación son bajas. En estos casos, los autónomos y pensionistas pueden tener opciones, dependiendo de su situación financiera y la naturaleza de sus ingresos.

Por último, cabe destacar que ser ser avalista conlleva riesgos significativos, ya que se podría llegar a embargar bienes si el titular de la hipoteca no paga. Existen límites en cuanto a lo que puede ser embargado, incluyendo salarios inferiores al salario mínimo, objetos personales y bienes necesarios para la subsistencia.

Esto resalta la importancia de entender completamente las implicaciones antes de comprometerse como avalista.