Periodista de Toledo. Humanista y folclórica. Hija de María Ángeles y nieta de Cayetana. Hablo rápido con amables personajes –Tusquets dixit–.
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Casi 170 pasajeros de Renfe que viajaban en TrenHotel anoche de Vigo a Barcelona tuvieron que bajarse del convoy a las 5 de la madrugada en Miranda de Ebro porque el maquinista, que cumplía su jornada laboral, dejaba su puesto y no había sustituto para seguir con el itinerario. La compañía tuvo que fletar un autobús que iría hasta Zaragoza y allí ser reubicados en otro tren para llegar, por fin, hasta la ciudad condal. Los viajeros mostraron su enfado a través de las redes sociales y la empresa ha anunciado la devolución del importe de todos los billetes.
Nuevo desastre en la organización interna de Renfe. Tras las multitudinarias quejas en la operación salida de Semana Santa y el colapso de la web de manera continuada por las promociones de billetes a 25 euros, anoche los pasajeros que salían de Vigo hasta Barcelona en el tren nocturno sufrieron una nueva Odisea.
Los pasajeros del TrenHotel Vigo-Barcelona, que ayer salía a las 17,55 horas de la ciudad gallega, no imaginaban que a mitad de camino tendrían que apearse en Miranda de Ebro y subirse a un autobús que les llevaría por carretera hasta Zaragoza para, finalmente, llegar hasta Barcelona.
En este tren con destino Barcelona, viajaba la conocida periodista Julia Otero que no dudó en expresar sus quejas a través de su cuenta de Twitter.
¿Cómo tienen la desfachatez de obligar a todos los pasajeros a bajar de madrugada en mitad de camino por 1 maquinista? @Renfe ¿quién dirige?
Eso sí, no es el único inconveniente al que se tuvieron que enfrentar los usuarios que pretendían llegar a Barcelona. Alrededor de las 22 horas, a la altura de Toral de los Vados (León), el tren se paró “por una falta de tensión eléctrica provocada por un intento de robo de cable”, según ha explicado Renfe a este periódico.
7.50. LD.920 Vigo- Barcelona. Por incidencia de orden público se realizará transbordo por carretera desde Miranda de Ebro hasta Zaragoza
El tren ya no iba a cumplir horarios, los pasajeros con destino Barcelona no llegarían a la hora prevista, el convoy llevaba más 2,5 horas de retraso. Se reanudaba la marcha, pero a las 5,30 horas de la madrugada, el tren volvía a parar en Miranda de Ebro, parada no prevista, porque el maquinista cumplía su jornada laboral.
Los viajeros no tuvieron más remedio que bajar del confortable TrenHotel procedente de Vigo, subirse a un autobús a altas horas de la madrugada y seguir su viaje por tierra hasta Zaragoza. A la ciudad maña llegó a las 9 horas de la mañana, los casi 170 pasajeros fueron realojados en un tres hasta Barcelona.
La compañía ha explicado a OKDIARIO que la parada en Miranda de Ebro no estaba programada, que “el relevo del maquinista estaba previsto en Logroño. El retraso del tren ha sido la causa de este enorme trastorno”. Además, añade que el maquinista abandonó el tren “de acuerdo con la reglamentación y no podía continuar por exceso de jornada laboral”.
Interior de uno de los trenes nocturnos de Renfe Foto: Renfe
La compañía ha pedido disculpas a sus pasajeros y ha anunciado que devolverá íntegramente el importe del billete de tren. Este TrenHotel que brinda Renfe a los pasajeros es descrito por la compañía como “servicio nocturno de alta gama, una habitación rodante para disfrutar de las comodidades de un hotel, con las ventajas de un tren”.
«El maquinista estaba cumpliendo con la ley”
No es la primera vez que Renfe tiene problemas entre los usuarios por no tener a un maquinista que tome las riendas del convoy porque ha terminado su jornada laboral. A finales de 2016 un tren Alvia que viajaba de noche de Santander a Madrid frenaba a la altura de Palencia y los pasajeros veían como el maquinista se bajaba del tren dejando el convoy sin ‘capitán’.
El Sindicato Español de Maquinistas y Ayudantes Ferroviaros (SEMAF) ha explicado que “igual que un conductor de autobús o de avión, no puede sobrepasar el tiempo máximo de conducción establecido. Estaba cumpliendo con la ley”.
La ley del sector señala que la jornada de los maquinistas no pueden exceder de cinco horas y media de conducción continuada y el conductor, “por seguridad, paró el tren al sobrepasarlas”, señalan las mismas fuentes.
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