Curiosidades

Qué es el síndrome de Alicia en el País de las Maravillas

Cuando hablamos del síndrome Alicia en el País de las Maravillas nos referimos al trastorno complicado donde los afectados ven la realidad distorsionada.

Suena bien porque se basa en la popular obra de Lewis Carroll, pero se trata de un síndrome bastante complejo.

Cuando hablamos del síndrome Alicia en el País de las Maravillas nos referimos a ese trastorno complicado en el que los afectados ven la realidad distorsionada, tal como le sucedía a la protagonista de este cuento.

En qué consiste

Suele afectar a niños y adolescentes principalmente que tienen una percepción gravemente distorsionada de muchas cosas. Es decir, que los objetos y partes del cuerpo parecen cambiar de apariencia. Esto provoca confusión y muchos síntomas a los que lo sufren.

Quien descubrió este síndrome fue John Todd, que en los síntomas vio algo parecido a diversos episodios por los que pasaba Alicia en la novela.

Cuáles son las causas

Quienes tienen el síndrome de Alicia en el País de las Maravillas suelen tener trastornos psicológicos y neurológicos graves. Esto se debe a diversos factores, desde hereditarios, a traumas en la infancia, pasando por las lesiones cerebrales como tumores o aneurismas.

Este problema también puede desarrollarse cuando se toman algunos medicamentos. Mientras es algo común para los que toman algunas drogas como LSD, éxtasis o la marihuana. En todo caso, ante el menor signo visto anteriormente conviene ir al médico y ser tratado por el especialista.

Principales síntomas

Los afectados de este síndrome pueden sufrir en demasía al ver los objetos distorsionados, incluso su propio cuerpo. También puede cambiar la percepción auditiva, táctil y espacial que suelen ver.

Entre los síntomas destacan los anteriores y la desorientación, sumado a perder cierto control y también sobre el sentido del tiempo. También pueden llegar a tener fuertes alucinaciones.

¿Existe tratamiento?

Aunque se trata de un síndrome distinto y complicado de llevar, puede tratarse de manos de especialistas. Conviene primero ir al médico, explicar el caso, y luego derivarse al psicólogo y psiquiatra.

Saber la causa que ocasiona este problema es importante para tratarlo, si bien una gran parte de las personas que lo sufren, como hay muchos síntomas graves, deben tomar medicación siempre que el psiquiatra lo crea necesario. Esto depende del grado de la enfermedad y de las condiciones de cada persona.