Curiosidades
Limpieza

Los ingredientes sorpresa para tener los cristales impolutos

Los cristales y espejos son dos de las cosas que más se ensucian en casa. No importa cuánto hagas por evitarlo, la suciedad y el polvo se acumulan en ellos. Afortunadamente, existe ingredientes sorpresa para tener los cristales impolutos que hallarás en tu hogar y te ayudarán a quitar estas suciedades.

¿Cuáles? Entre los ingredientes que hay en la mayoría de las viviendas y que sirven para limpiar los cristales están la cebolla, las patatas y el vinagre.

¿Qué ingredientes sorpresa usar para tener los cristales impolutos?

El papel de cocina y de periódico no son ecológicos y no dejan los espejos ni los cristales limpios, a pesar de que la mayoría de las personas los utilizan cuando pretenden deshacerse de la suciedad. Todo lo que te hace falta es recurrir a alguno de los ingredientes naturales que hemos mencionado anteriormente.

Cómo limpiar los cristales con cebollas

La cebolla es un eficaz producto de limpieza, un quitagrasas que ayuda a eliminar las manchas de salpicaduras oleosas en la superficie de los cristales. Como probablemente tengas al menos un par en casa, no deberás salir de compras para limpiar tus espejos.

Y no poseen contraindicaciones, así que puedes usarlas sin temor de que afecten tu piel o tus ojos durante el proceso de limpieza. Lo mejor de todo es que dejan las superficies de los cristales con más brillo a la altura de los productos químicos pero sin los riesgos de éstos. Hablamos del peligro de sufrir reacciones adversas, leves o graves, causadas por alguna alergia.

Lo único que debes hacer es cortar una cebolla a la mitad y pasar su parte interior por la superficie del espejo. Hazlo en círculos, presionando ligeramente para quitar las manchas de aceite y los restos de polvo.

Si el espejo o cristal está muy sucio, puede que debas descartar esa media cebolla y usar luego la otra media cebolla para obtener buenos resultados. Por supuesto, si la superficie es demasiado grande tendrás que usar más de una cebolla.

Una vez que hayas finalizado, pasa un paño de microfibra seco para retirar los residuos de la cebolla y pulir la superficie del cristal. El espejo quedará reluciente. Si no tienes un paño, puedes pasar un trapo humedecido o un periódico viejo. Los propios compuestos de la cebolla impiden que su tinte manche los cristales.

Cómo limpiar los cristales con patatas

Este procedimiento es básicamente igual que el anterior, pero en esta ocasión vas a cortar una patata a la mitad y pasar la parte inferior por la superficie. Recuerda usar cuantas medias patatas necesites. A mayor suciedad y superficie, entonces más patatas requerirás.

Luego pásale un paño, un trapo o un diario, absorbiendo los residuos de la patata. Es importante que primero exprimas este tubérculo para que todo el líquido que contiene no dificulte la limpieza.

Cómo limpiar los cristales con vinagre: ingredientes sorpresa

El vinagre es otro de esos productos de limpieza inesperados. Tienes que preparar una mezcla de tres tazas de vinagre blanco con tres tazas de agua, o cantidades proporcionales, y rociar la superficie del cristal o espejo con ese líquido.

Deja que actúe varios minutos, y luego limpia con un paño, trapo o diario. De hecho, recomendamos el vinagre mejor que las cebollas y las patatas porque, a diferencia de aquellas, es antibacterial y mata los microorganismos que pueden poner en la salud de tu familia en familia. Si tienes hijos pequeños y manipulan los espejos, siempre va a convenir limpiarlos con vinagre.

¿Por qué limpiar tus cristales y espejos regularmente?

Los espejos y cristales se ensucian muy rápidamente. La velocidad con la que lo hagan dependerá de dónde se encuentren y de lo muy expuestos que estén a los  cambios de temperatura, las corrientes de aire, el contacto con los seres humanos, etc.

Esto explica por qué los espejos del baño se ensucian mucho más rápidamente que los espejos decorativos de la sala. Los cristales del coche son otro ejemplo de espejos expuestos que suelen ensuciarse al cabo de unas pocas horas.

Algo parecido es lo que sucede con las puertas, mesas de café y vitrinas de vidrio. Las huellas dactilares son comunes en ellas, y la grasa se adhiere aunque no sepamos cuándo ocurre. Limpiar los cristales no es sólo un asunto estético sino también sanitario.

Los microorganismos como las bacterias y los virus habitan los espejos y la forma correcta de exterminarlos es a través de la limpieza. De lo contrario, es posible que acaben volando por los espacios de casa y afectando a tu familia.

¡Mantén tus cristales impolutos con espuma de afeitar!

No importa si has limpiado los espejos con cebollas, patatas o vinagre. Para mantenerlos impolutos, no hay nada más aconsejable que la espuma de afeitar. Simplemente echa un poco sobre un paño y frótalo en el espejo. Al finalizar, te sugerimos pasar un paño de microfibra seco para que no queden rastros de espuma de afeitar.