Un hombre confunde un zorro con un perro en Facebook

• Gemma Meca
• Licenciada en Historia, máster en Periodismo y Comunicación Digital. Redactora en Ok Diario. Cuento historias, soy amante de los astros, sigo a la luna, los TT de Twitter y las tendencias en moda. Experta en noticias de consumo, lifestyle, recetas y Lotería de Navidad.
• • 15/05/2019 09:30
  • Actualizado: 05/12/2023 11:16

Los zorros son animales salvajes con un cierto parecido con los perros. En su día a día estos animales habitan en el bosque y en zonas aisladas, aunque los humanos han acabado invadiendo su hábitat. En este vídeo vemos a un zorro perdido a las afueras de una ciudad en busca de comida. Este cazador entra en el espacio prohibido en busca de alimentos y termina encontrándose con un humano que quiere compañía. El autor del vídeo llama al animal, como si de un perro se tratará a la espera de que reaccione como un animal de compañía.

El zorro muestra su carácter natural en Facebook

Este hombre del vídeo ve un zorro a lo lejos. Este animal de cola majestuosa y aspecto similar al de un perro llama su atención. Inmediatamente se pone a llamarlo para poder verlo más de cerca. A oscuras el zorro se va acercando, solo vemos unos ojos brillantes a lo lejos que buscan desesperadamente algo de comida.

El animal se va acercando poco a poco, el hombre contento de su actuación intenta acariciarlo, como si fuera un perro de verdad. El zorro hace lo mismo que haría en cualquier otra parte, muerde la mano del hombre que se la hace llegar para poder tocarlo. El hombre sorprendido por la mordedura empieza a gritar y maldecir al pobre animal. Lo único que puede hacer el zorro es marcharse corriendo.

El error del protagonista de este vídeo ha sido confundir el carácter de un perro con un zorro. Los animales salvajes no están preparados para ser acariciados o tratados de la misma forma que una mascota. El zorro reacciona siguiendo sus instintos de supervivencia y muerde pensando que se trata de un poco de comida. El hombre seguro que no volverá a querer acariciar nunca más a ningún zorro.