Mazón entierra la dictadura del catalán: 570.000 familias elegirán la lengua académica de sus hijos

• Ignacio Martínez
• VALENCIA
• Responsable de OKDIARIO en la Comunidad Valenciana
• • 11/02/2025 14:19
  • Actualizado: 11/02/2025 17:53

El presidente de la Generalitat Valenciana, Carlos Mazón, ha enterrado este martes definitivamente lo que se conoció como el procés acelerado a la valenciana de los gobiernos del socialista Ximo Puig y los nacionalistas de Compromís. De facto, Mazón ha sepultado la dictadura del catalán en la Comunidad Valenciana. Y, de la mano de la Ley de Libertad Educativa aprobada con Vox, ha presentado la campaña en la que un total de 570.000 familias elegirán de modo telemático entre el 25 de febrero y el 4 de marzo la lengua académica de sus hijos en la Comunidad Valenciana. Una medida sin precedentes que marca el final de la imposición y el principio de la libertad y de la elección.

Carlos Mazón ha presentado junto al conseller de Educación valenciano, José Antonio Rovira, la campaña sobre la elección de lengua base en los centros educativos de la Comunidad Valenciana.

La campaña tiene el lema Dos llengües, una Comunitat (Dos lenguas, una Comunidad) y su finalidad es dar a conocer el procedimiento para participar en la consulta de la lengua base en los centros educativos por primera vez en la historia de la autonomía.

El objetivo de la consulta es que las familias elijan con libertad la lengua principal en la educación de sus hijos. El sistema será a través de una votación telemática a través de la página web consulta.gva.es, que se activará en unos días. En ella, se habilitarán, también, manuales y tutoriales sobre cómo ejercer el derecho de elección.

La consulta está dirigida a 570.000 familias de alumnos de segundo ciclo de Infantil, Educación Primaria y los tres primeros cursos de Educación Secundaria Obligatoria (ESO). Se desarrollará entre el 25 de este mes de febrero y el 4 de marzo en todos los centros educativos públicos y concertados de la Comunidad Valenciana.

Carlos Mazón ha remarcado la apuesta del Gobierno valenciano por la «convivencia» y el «equilibrio entre el valenciano y el castellano y la capacidad de decisión de las familias frente a la confrontación y la imposición lingüística» que se vivió durante los ocho años del Gobierno del socialista Ximo Puig y Compromís.

Pero, además, Carlos Mazón ha lamentado que precisamente ese Gobierno de Ximo Puig «sustituyera la posibilidad de que en un centro educativo pudieran convivir las líneas en valenciano y en castellano por un modelo único por cada centro, que obligaba a cada colegio a tener una sola lengua base». Y ha recriminado al Ejecutivo de su antecesor que «obviara» la diversidad sociolingüística que existe en la Comunidad Valenciana.

Frente a ello, Carlos Mazón ha defendido la Ley de Libertad Educativa, porque recupera «la pluralidad y el equilibrio» y porque concede a los valencianos «el poder de decidir».

Pero, además, el presidente de la Generalitat Valenciana ha hecho un llamamiento a la participación libre en la consulta: «Cuantas más familias ejerzan su derecho, mejor se ajustará la oferta que haga la Administración de puestos escolares en cada lengua base a las demandas de las familias».

Con esta consulta y, sobre todo, con la Ley de Libertad Educativa, Carlos Mazón ha asegurado que la voluntad de su Gobierno y de la Conselleria de Educación es que todos los alumnos que cursan sus estudios en la Comunidad Valenciana «conozcan y sean competentes en castellano y en valenciano», con independencia de la lengua en que hayan aprendido a leer y a escribir, «tal como promulgaba la Llei d’Us (Ley de Usos del Valenciano), cuyo espíritu de consenso» quieren «recuperar».

De hecho, el resultado de la consulta no significará el aplastamiento de una lengua sobre la otra como sucedía con el valenciano con el castellano en tiempos de la imposición lingüística de Ximo Puig y Compromís, sino un sistema equilibrado, porque la diferencia entre la lengua base elegida y las asignaturas en que se imparta la otra lengua será sólo de un 20%.

Así, en las zonas castellanoparlantes, todo el alumnado cursará como mínimo la asignatura de valenciano. Si bien, podrán pedir la exención de su evaluación. No obstante, en esas áreas, castellanoparlantes y en aras de la libertad educativa, las familias podrán solicitar también el valenciano como lengua base si así lo desean. Y con independencia de la lengua base podrán realizar las pruebas de evaluación en la lengua que consideren oportuno.

Una vez realizada la adscripción de todo el alumnado matriculado a una u otra lengua base, las familias podrán seguir ejerciendo su derecho a elegir mediante la participación en los procedimientos de admisión. Tanto, cuando se trate de hijos e hijas para los que pidan plaza por primera vez, como en los casos en que quieran cambiar de centro escolar. En esos casos, las familias podrán elegir centro y lengua base en sus solicitudes.

Carlos Mazón ha incidido en su intervención en unas cuestiones clave. Una, que con esta iniciativa el Gobierno valenciano que él preside cumple con uno de los principales hitos de la legislatura, que es el de recuperar las libertades en el ámbito educativo. Un hito que se suma al de la educación libre, universal y gratuita de 0 a 3 años, que ya está en marcha desde inicios de la legislatura. Y al distrito escolar único, que también.

Otro hito es el de la libertad para que los niños valencianos puedan hacer los exámenes de las asignaturas no lingüísticas en valenciano o castellano. Y el derecho de los alumnos con necesidades educativas especiales a estudiar en su lengua habitual: «Y a que el sistema se adapte a ellos y no al revés», ha destacado Carlos Mazón.

Finalmente, Carlos Mazón ha destacado también el reconocimiento que la propia Administración está realizando ya de los conocimientos de valenciano a los alumnos que finalicen los estudios. De hecho, la Generalitat ha expedido ya más de 60.000 certificados en los cuatro primeros meses tras la puesta en marcha de la medida.