Eventos científicos reales dignos de Halloween 2018

Monstruos, vampiros, zombis, experiencias sobrenaturales… A veces, la realidad supera la ficción o de los hechos verdaderos nacen otros imaginados. Por eso vamos a descubrir algunos eventos científicos que sorprenden e incluso aterrorizan más que cualquier disfraz de Halloween 2018.

Por ejemplo, las experiencias cercanas a la muerte. No son pocos los seres humanos que han estado clínicamente muertos y relatan el famoso túnel con luz al final o el sentimiento de que el alma abandona el cuerpo inerte. Según la ciencia, sería cosa del cerebro por culpa del suceso traumático que es la muerte en sí, ya que se involucra un funcionamiento anormal de la dopamina y la sangre.

Los zombis existen, al menos, en el mundo de las hormigas. Estos seres pueden perder el control de su cuerpo por completo, igual que su voluntad, cuando son infectadas por hongos de la especie Ophiocordyceps. Según investigadores de la Universidad de Pensilvania, estos organismos manipulan el comportamiento de la hormiga para dispersar sus esporas en lugares considerados idóneos.

Y si rara es la hormiga zombi, no menos lo serán las criaturas capaces de seguir vivas tras perder la cabeza, y no precisamente por locura, sino literalmente. Pasa con las ratas, por ejemplo, que mantienen la actividad eléctrica en el cerebro incluso después de haber sido seccionado del resto del cuerpo.

Otros eventos científicos reales verdaderamente terroríficos

Aunque no pocas civilizaciones antiguas pronosticaron el fin del mundo, la ciencia tiene claro que llegará. La ONU considera que los glaciares acabarán en 2350, por lo que la faz de la Tierra, para entonces, habrá cambiado mucho por culpa del cambio climático. Pero igualmente puede haber una súper irrupción volcánica, el choque de un meteorito o que el Sol consuma todo su hidrógeno y crezca hasta acabar con nuestro planeta.

El hombre de Atapuerca practicaba el canibalismo con total naturalidad hace unos 800.000 años. Parece algo raro, pero para ellos era como una especie de ritual, algo normal, pues no era por falta de alimento.

Los vampiros existen, al menos, así afirmaron los antropólogos y arqueólogos que abrieron una fosa común Lazzaretto Nuovo en Venecia. Allí encontraron un esqueleto femenino víctima de la peste que había sido profanado por miedo a que volviera de la muerte. De hecho, le habían puesto un ladrido en la boca para que no mordiese.

Antaño, hace unos 150 millones de años, los monstruos caminaban por la Tierra. O así se cree tras conocer al pliosaurio, con una longitud de unos 16 metros y que fue el terror de los océanos jurásicos por su voracidad y físico temible.