Las partes del cuerpo que se verán perjudicadas por tu embarazo y no lo sabías

Las piernas, por culpa de la retención de líquidos; el vientre, que irá creciendo y trayendo consigo pesadez, o los pies, que se hincharán notablemente, son algunas de las partes del cuerpo que todos sabemos que se ven afectadas por el embarazo y, concretamente, por los síntomas que van apareciendo. No obstante, si quieres tener un hijo, debes saber que no serán las únicas que se sentirán perjudicadas.

¡Qué va! Hay otras muchas zonas de tu organismo que también sufrirán y que quizás no lo sabías. Si sigues leyendo, las descubrirás:

Las encías

Aunque no le sucede a todas las gestantes, son muchas las futuras mamás que durante los nueve meses del embarazo tienen que hacer frente a problemas en sus encías. Concretamente sufren lo que se da en llamar gingivitis, que es el sangrado frecuente de las mismas.

Los cambios hormonales que se experimentan en ese tiempo así como la posible placa bacteriana que tuvieran dentro de su boca son los causantes de que se produzca ese problema, del que merece la pena conocer estos otros datos de interés:

• Suele aparecer, por regla general, entre el segundo y el tercer trimestre.

• Hay que destacar que, además de las citadas alteraciones hormonales, también pueden provocar esta problemática las propias náuseas matinales, que evitan que la mujer pueda lavarse los dientes adecuadamente porque le dan arcadas al oler la pasta dentífrica e incluso al llevársela a la boca.

• Las señales que indican que existe gingivitis no sólo es el sangrado de las encías sino también que estas presenten un color excesivamente enrojecido, que se hallen muy sensibles o incluso que hayan aumentado de volumen.

• La manera de acabar con el citado problema no es otra que llevar a cabo un tratamiento consistente en el raspado y el alisado radicular, para poder acabar con todas las bacterias existente, y luego un pulido. Asimismo es fundamental que la mujer se someta a una exhaustiva limpieza bucodental por parte de su dentista.

• Es fundamental que la gestante mantenga en todo momento una buena higiene diaria para evitar la acumulación de sarro y que aparezca la citada gingivitis.

El cerebro

Sí, has leído bien. El cerebro es otra de las partes del cuerpo que también se ve muy afectada por el embarazo aunque te resulte increíble. Y es que este tendrá que soportar el estrés, la ansiedad y los nervios habituales que experimentan las embarazadas, especialmente las primerizas, ante el parto, la llegada del bebé, el cuidado del pequeño, el saber si serán buenas madres o no, el comprarle todo lo que necesita…

Pero no sólo eso. También el cerebro se verá afectado por la revolución hormonal de las mujeres en el sentido de que esas sufrirán constantes cambios de humor, estarán mucho más sensibles y, además, padecerán mala memoria.

Pregúntale a cualquier fémina de tu círculo que haya tenido un hijo y te dirá que durante el periodo de gestación se dio cuenta de que se volvió mucho más olvidadiza o bien más distraída. Y así se ha podido demostrar científicamente, aunque no existe una causa concreta que explique ese fenómeno.

Las preocupaciones constantes, el tener que hacer frente a una gran variedad de síntomas o incluso el cansancio que puede experimentar son algunas de las razones que se barajan como posibles responsables de esa situación, que luego, una vez que se da a luz desaparece. Así, que no hay que temer.

La nariz

Además de las encías y del cerebro, no debes pasar por alto que también la nariz se ve afectada por el embarazo. Es cierto que no les sucede a todas las mujeres, pero sí a un elevado número de esas. En concreto, lo que pasa es que sufren pequeños sangrados nasales como consecuencia de que tienen esa parte del cuerpo más congestionada de lo habitual. Una situación esta que, al mismo tiempo, da como resultado que cuando duermen roncan mucho más de lo que lo venían haciendo antes de quedarse en estado.

Para poder evitar esas hemorragias, que son normales, lo que debe hacer la mujer es seguir estos consejos:

• Beber mucha cantidad de agua al día, para que así sus fosas nasales se encuentren perfectamente hidratadas.

• Consultar a su médico y, si así este lo permite, optar por hacer uso de un lubricante nasal.

• Evitar los ambientes que estén demasiado secos.

Posiblemente, no sabías que estas tres partes del cuerpo se podrían ver notablemente afectadas durante el embarazo, pero ahora ya eres consciente de eso y, si quieres tener un hijo, tenlo muy presente para tomar las medidas necesarias en pro de evitar las mayores molestias posible. No obstante, no te olvides tampoco de que tus manos se van a ver hinchadas, así que ten cuidado con los anillos que lleves, y de que tus caderas te pueden llegar a doler como consecuencia del aumento considerable de tu vientre.