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El aviso de los pediatras sobre esto que haces con tu bebé durante el verano: es un peligro

Durante el verano, es crucial proteger a los bebés del calor extremo. Las altas temperaturas como las que estamos alcanzado en la actual ola de calor pueden ser especialmente peligrosas para los más pequeños, cuya capacidad para regular la temperatura corporal no está completamente desarrollada. Muchos padres, con la mejor de las intenciones, creen que tapar el carrito del bebé con una muselina o pañuelo ayudará a protegerlos del sol. Sin embargo, este hábito puede tener el efecto contrario, creando un entorno aún más peligroso dentro del cochecito. La falta de ventilación adecuada puede hacer que la temperatura en el interior del carrito aumente rápidamente, poniendo al bebé en riesgo de sobrecalentamiento.

En un post reciente en redes sociales, la pediatra y divulgadora Laura Álvarez explicó por qué es desaconsejable cubrir el carrito del bebé con una muselina o pañuelo. Aunque parece una medida lógica para proteger al bebé de los rayos solares, el resultado puede ser peligroso. Es común ver a familias, abuelos y padres paseando a los bebés en cochecitos cubiertos durante los meses de verano. La intención es buena, pero el hábito puede resultar en un incremento significativo de la temperatura dentro del carrito, lo cual es perjudicial para la salud del bebé. Ya hace tiempo se explicó por qué no es bueno cubrir el carrito cuando el bebé duerme, basándose en un estudio del hospital pediátrico de Estocolmo, Suecia. En el estudio, se colocó un cochecito en la calle, primero destapado y luego tapado. Los resultados mostraron que cuando el cochecito estaba cubierto se calentó más rápido, alcanzando una temperatura de hasta 12 grados más que cuando estaba descubierto. Esto demuestra que tapar el carrito con una tela puede crear un «efecto invernadero», aumentando peligrosamente la temperatura en su interior y exponiendo al bebé a riesgos significativos.

El aviso sobre esto que haces con tu bebé en verano

La principal razón por la que tapar el carrito es peligroso se debe a la falta de ventilación adecuada. Cuando se cubre el cochecito con una tela, se bloquea el flujo de aire, lo que impide la disipación del calor acumulado en su interior. Esto puede llevar a un aumento significativo de la temperatura, creando un ambiente sofocante para el bebé. Además, los bebés tienen una capacidad limitada para regular su temperatura corporal, lo que los hace más vulnerables al sobrecalentamiento y a los golpes de calor.

El experimento sueco: una advertencia contundente

El experimento realizado por el hospital pediátrico de Estocolmo es una advertencia clara de los peligros de cubrir el carrito del bebé. Al comparar un cochecito cubierto con uno descubierto, los médicos encontraron que dejándolo al sol entre las 11:30 y las 13:00 la temperatura del cochecito sin tapar había alcanzado los 22 °C después de 30 minutos, pero cuando se colocó una sábana encima alcanzó los 34 °C en la misma cantidad de tiempo.

De este modo se demostró que incluso una simple muselina puede convertir el cochecito en una trampa de calor, poniendo en riesgo la salud del bebé. Este aumento de temperatura no solo es incómodo, sino que también puede ser peligroso, provocando deshidratación y golpes de calor en los bebés.

La explicación de la pediatra Laura Álvarez

Junto al estudio, también se cuenta con el testimonio de la pediatra Laura Álvarez que conocida por su divulgación en redes sociales bajo el nombre de @lapediatralaura ha abordado este tema en detalle. Según la doctora Álvarez, cubrir el cochecito del bebé puede aumentar la temperatura interna hasta 15°C más en solo 30 minutos. Esto es alarmante, considerando que los bebés regulan su temperatura corporal mucho peor que los adultos, lo que los pone en mayor riesgo. La pediatra advierte que esta práctica comúnmente vista en verano es peligrosa y debe evitarse para proteger la salud de los bebés.

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Una publicación compartida de Dra. Laura Álvarez 🩺-Vila-real (Castellón) y online (@lapediatralaura)

Alternativas seguras para proteger al bebé del sol

En lugar de cubrir el carrito con una muselina o pañuelo, la doctora Álvarez recomienda alternativas más seguras para proteger al bebé del sol. Una opción es utilizar una capota ventilada que permita la circulación del aire mientras bloquea los rayos solares. Otra alternativa es añadir una sombrilla al cochecito, lo cual ofrece sombra sin impedir la ventilación. Finalmente, siempre es recomendable pasear al bebé por áreas sombreadas, evitando la exposición directa al sol durante las horas más calurosas del día.

En definitiva, la práctica de cubrir el cochecito del bebé con una muselina o pañuelo, aunque bien intencionada, puede ser extremadamente peligrosa durante el verano. La falta de ventilación adecuada puede causar un aumento rápido de la temperatura en el interior del cochecito, poniendo al bebé en riesgo de sobrecalentamiento y golpes de calor. Es crucial seguir las recomendaciones de los expertos, como el estudio mencionado y la pediatra Laura Álvarez, y optar por alternativas más seguras para proteger a los bebés del sol. La salud y el bienestar de los más pequeños deben ser siempre la prioridad, y evitar prácticas riesgosas es fundamental para asegurar su seguridad durante los meses de calor.