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El PSOE delira: critica al alcalde Martínez por la inseguridad tras estar ocho años de brazos cruzados

Asegura que los palmesanos "se sienten desprotegidos" ante la falta de liderazgo político del primer edil del PP

Exige al gobierno municipal que ponga guardias en los parques para prevenir el vandalismo y hacer cumplir las ordenanzas

  • Indalecio Ribelles
  • Redactor de OKBaleares, información local de Palma, social y política. Antes, redactor en EL MUNDO/ Baleares durante 20 años.

El PSOE delira. En una moción presentada al pleno del Ayuntamiento de Palma culpa y critica al alcalde del PP, Jaime Martínez, que lleva seis meses en el cargo, por la inseguridad en los barrios tras haber estado los socialistas de brazos cruzados los ocho años que han gobernado en la capital balear.

Pero ahí no queda la cosa. Según la portavoz municipal socialista, Rosario Sánchez, es «la evidente falta de liderazgo político» del primer edil palmesano, lo que, a su juicio, estaría provocando «una sensación de impotencia entre los residentes que se sienten desprotegidos».

Después de convertir Palma las pasadas dos legislaturas en la quinta ciudad de España con mayor número de delitos y acusar a un PP que hasta mayo estaba en la oposición de crear alarma social cuando denunciaba el aumento de las tasas de criminalidad, el PSOE presenta una moción al primer pleno del recién estrenado 2024 en la que insta al gobierno municipal a «adoptar medidas inmediatas para reforzar la vigilancia en nuestros barrios». 

Por ello, los socialistas exigen «destinar recursos y personal adicionales según las necesidades identificadas, en colaboración con las asociaciones de vecinos y abordar el estado de seguridad en los barrios y buscar soluciones».

Tras dejar la Policía Local con una merma de efectivos de más de 300 agentes, desarticular hasta su casi completa desaparición la denominada policía de barrio que el ex alcalde socialista José Hila prometió reforzar y llevar a cabo una política de permisividad casi total con la venta ambulante ilegal, pintadas vandálicas e inmigración ilegal, la portavoz socialista Rosario Sánchez achaca el supuesto incremento de la inseguridad «a la falta de medidas efectivas para abordar esta problemática» y » la evidente falta de liderazgo político» .

Por ello, considera que el primer edil palmesano tiene que abordar de forma urgente y efectiva la «creciente sensación de inseguridad que afecta a nuestros barrios en los últimos meses», como lo demostraría, a su juicio, la «escalada de noticias sobre robos con violencia, apuñalamientos y el acoso a vecinos, entidades y comercios», que ha generado «un ambiente de inseguridad que compromete la calidad de vida de los ciudadanos y la reputación de seguridad de nuestra ciudad».

Sin aportar dato oficial alguno que respalde estas acusaciones, para los socialistas «ha habido un aumento de actos vandálicos por toda la ciudad, como la creciente quema de contenedores».

Un hecho que indican que no sólo afecta a la propiedad pública, sino que «también pone en riesgo la seguridad de los edificios de viviendas próximas, lo que preocupa en gran medida a las asociaciones de vecinos que ponen el foco en la falta de vigilancia en los barrios, y en el incumplimiento de ordenanzas tanto de movilidad, ocupación de vía pública, limpieza, etcétera, lo que dificulta la convivencia».

Desde el Grupo Municipal Socialista consideran que «la inacción y incapacidad» del que llaman «gobierno PP-Vox» -si bien los de Santiago Abascal no forman parte del mismo y sólo han suscrito un acuerdo programático con el PP- para coordinar los servicios municipales y las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad» ha generado un vacío de acción, evidenciado por la no convocatoria de la Junta Local de Seguridad en esta legislatura, un mecanismo esencial para abordar de forma integral los desafíos en materia de seguridad, promoviendo la cooperación entre todas las partes involucradas».

El PSOE de Palma también reclama al gobierno municipal poner en marcha  campañas para concienciar a la ciudadanía sobre las consecuencias del vandalismo y reforzar las sanciones a aquellos que perpetren actos vandálicos, asegurando una respuesta firme y disuasiva.

Y por último exige que el alcalde Martínez destine agentes a parques y jardines para evitar ataques vandálicos, «favorecer la convivencia y el cumplimiento de las ordenanzas en su interior».