La Fiscalía pide 25 años de cárcel para la empleada del hogar que intentó matar al bebé al que cuidaba
Intentó matar en dos ocasiones a la bebé de un año de edad
Este martes 28 de noviembre, la Audiencia Provincial de Madrid acoge el juicio contra una mujer rumana que cuando trabajaba de empleada del hogar intentó matar en dos ocasiones a la bebé de un año de edad a la que cuidaba. La Fiscalía solicita 25 años de cárcel para la cuidadora y 23.000 euros de indemnización para los padres de la víctima.
El representante del Ministerio Público le imputa un delito de asesinato en grado de tentativa, al tiempo que le reclama para los responsables legales de la menor una indemnización de 8.000 euros por los días que tardaron en curar sus lesiones y una multa de 15.000 euros por los daños morales causados.
La acusada fue contratada el 1 de septiembre de 2016 con carácter indefinido para desarrollar funciones domésticas como empleada de hogar en el domicilio de Madrid. Entre las funciones encomendadas, la mujer debía de cuidar de los tres hijos menores de edad de la familia de seis, cuatro años y una bebé de tan solo cuatro meses.
El relato de hechos de la Fiscalía cuenta cómo el 28 de febrero de 2018, cuando la empleada del hogar se encontraba a solas con los menores en el domicilio familiar, agredió a la más pequeña en la cabeza con algún objeto contundente no identificado.
Según la Fiscalía, la empleada del hogar quería matar a la bebé y lo hizo «a sabiendas de que, tanto por la forma de la agresión como por la zona corporal afectada, su ataque era susceptible de causarle la muerte, prevaliéndose de que la edad de la niña impedía cualquier mecanismo de defensa por su parte”».
A consecuencia de la agresión, la menor presentaba en la exploración clínica
una céfalohematoma a nivel frontal izquierdo y rigidez cervical, «por lo que en aquel momento se le diagnosticó contusión cervical y traumatismo craneoencefálico leve. No obstante, a partir de entonces la niña comenzó a presentar dificultades para dormir e incapacidad para permanecer tumbada por la incapacidad para girar el cuello, necesitando un collarín cervical para su curación.
De nuevo el 13 de marzo de 2018, en torno a las 16:30 horas, la procesada
intentó matar a la bebé de la misma forma, es decir, golpeándola nuevamente de forma violenta en la cabeza. A consecuencia de esta agresión, la menor sufrió el despegamiento de su pabellón auricular derecho, además de varios hematomas y edemas.
Al presentar estas lesiones, se efectuaron diversas pruebas radiológicas a la
menor siendo necesario para ello aplicarle anestesia general, diagnosticándosele fractura parietal izquierda compleja con múltiples trayectos y mínimamente desplazada, hematoma subdural parietal, hematoma subgaleal, así como fractura del arco posterior derecho de la vértebra cervical C2, quedando ingresada de forma inmediata en la unidad de reanimación del servicio de neurocirugía con el fin de poder
controlar la evolución de las lesiones ante el riesgo vital de las mismas.
A causa de las lesiones que le produjo la empleada del hogar, la bebé permaneció dos días hospitalizada en observación hospitalaria. La bebé tuvo que llevar un collarín cervical durante un mes y tardó setenta y cuatro días en curar sin quedarle secuelas.
El juicio arranca éste martes en la Audiencia Provincial de Madrid con la declaración de la acusada, que estuvo seis meses en prisión provisional desde mayo a octubre del año 2018.
Temas:
- Asesinatos
- Madrid