Las cámaras delatan al asesino del crimen de Ciudad Lineal

• Ángel Moya @AngelMoyatv
• Periodista en activo desde 1994, especializado en información de sucesos y actualidad. En OKDIARIO desde el año 2018, también colaboro en televisión y en radio.
• • 02/06/2020 10:12
  • Actualizado: 02/06/2020 11:10

Fue un asesinato machista. El 26 de febrero de 2020 pasadas las 13:00 h Antonio Leal presuntamente disparó a quemarropa a Ester Escobar en la sien. El crimen tuvo lugar en la acera de la calle Virgen de los Reyes de Madrid a escasos metros de la tienda de arreglos que regentaban sus hermanas.

Ya en el hospital, donde falleció Ester, las hermanas señalaron a Antonio como el presunto asesino. Sin embargo faltaban las pruebas que llegaron poco a poco. En primer lugar las hermanas de la víctima contaron que Ester vivía una relación intermitente con Antonio desde que se conocieron en agosto de 2019. Una relación marcada por el miedo cada vez que Antonio la amenazaba pistola en mano con matarla. Él quería una relación estable y ella no aunque aceptaba el dinero que le daba Antonio. Y cada vez que ella se negaba a formalizar la relación él sacaba la pistola. Así llegaron hasta el día 26 de febrero y las cámaras grabaron la secuencia de los hechos, son estas imágenes que les mostramos en OKDIARIO.

Las cámaras captaron a Antonio por primera vez a las 12:55 del día 26 caminando en dirección a la tienda de las hermanas de Ester con una bolsa blanca en sus manos. Antonio camina rápido, oculta su cara con una gorra de visera y gafas de sol. En la bolsa llevaba una cazadora para regalar a un familiar de Ester en Paraguay. Lo que no captan las cámaras es que Antonio esconde entre sus ropas una pistola del 9mm cargada.

Las siguientes imágenes corresponden al momento en que se encuentra con Ester. Son las 11:57.  La mujer, vestida con una chaqueta roja y pantalones negros, había accedido a verse con Antonio una vez más para un encuentro esporádico sin saber que serían sus últimos minutos de vida. Ignora que poco después, Antonio supuestamente le iba a descerrajar un disparo en la sien a quemarropa sin darle la mínima oportunidad de huir o defenderse.

La casualidad hace que la conversación entre la pareja siga en un ángulo muerto de las cámaras de seguridad del bazar de la esquina. Las cámaras no consiguen grabar el momento exacto del crimen pero sí graban al presunto asesino vestido exactamente igual que Antonio huyendo de la escena del crimen. En su huida Antonio pasa junto a varios vecinos que no le prestan atención porque miran hacia la acera donde ha caído herida de muerte Ester. Sólo un menor de edad se fija en la cara del hombre que huye y horas después lo reconoce en las fotos que le muestran los investigadores de homicidios.

Sin embargo, ni toda esta secuencia criminal en imágenes, ni el reconocimiento de un testigo, ni las amenazas que cuentan las hermanas de la víctima garantizarían al cien por cien que se hiciera justicia. Pero en este caso, el presunto asesino huyó de Madrid y terminó entregándose en Albacete a la policía local el 1 de marzo. A ellos les dijo que había matado a Ester por celos. Luego no volvió a declarar ni ante la policía ni ante el juez, pero para entonces la policía ya ha analizado la ropa que Antonio portaba el día del crimen encontrando residuos de disparo en las prendas.