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Lo que debes tener en cuenta en los pies de los niños

Los primeros años de vida de los niños son fundamentales para poder anticiparnos a distintos problemas físicos. Al advertir la presencia de anomalías es posible corregirlas ya que el cuerpo aún no se ha desarrollado del todo. Esto es lo que debes tener en cuenta en los pies de los niños.

En este artículo queremos detenernos específicamente en aquellos indicios a los que hay que prestarles atención a los pies , puesto que muchas veces sus extremidades inferiores tienen defectos.

Qué tener en cuenta en los pies de los niños

De hecho, los pies son una de las principales partes del cuerpo de los menores si de defectos físicos hablamos. Una consulta con el podólogo puede ayudar a resolver el inconveniente sin que sufran secuelas en la adultez.

Desde el Colegio Oficial de Podólogos de la Comunidad Valenciana -ICOPCV- nos recomiendan seguir de cerca hasta cinco signos en estas extremidades respecto a los posibles problemas o bien descartarlos.

Caídas frecuentes

Una de las señales de alerta más importantes para los padres son las caídas frecuentes, más allá de la superficie. Si tu hijo tiende a caerse cuando ya camina por su cuenta, debes llevarle al médico para que lo evalúe, estableciendo si convive con algún nivel de ceguera, fallos en la coordinación o un error en el calzado.

Andar de puntillas

Evidentemente, es poco común que alguien camine de puntillas, por lo que si el niño lo hace, hay que seguir esta conducta que puede acabar provocando un acortamiento del talón de Aquiles, con el riesgo de que se rompa.

Tocarse los pies

Los pequeños tienden a explorar su organismo de muchas formas y una es jugando con sus piernas y sus pies. Pero si este comportamiento se vuelve repetitivo pueden tener lesiones, infecciones o incluso hiperhidrosis.

Desgaste de los zapatos

La relación entre los menores y el calzado es clave para determinar si hay desperfectos en la posición al pisar. Chequea si el desgaste está en la suela o bien sobre los laterales del zapato para poder descubrirlo.

Pies demasiado hacia adentro

Aunque la anormalidad anterior no es tan perceptible a simple vista, los pies demasiado torneados hacia adentro sí que pueden distinguirse con sólo mirar el modo en el que apoyan las piernas sobre el suelo para sus movimientos.

Si no se te escapa ninguno de estos detalles, podrás actuar antes de que sea demasiado tarde para tu pequeño.