Receta de gambas rebozadas con salsa agridulce

Estas gambas rebozadas con salsa agridulce son perfectas para servirlas en una cena o comida de tapas de lo más veraniega. Las gambas son un ingrediente que garantizarán el éxito de cualquier acto. Un marisco delicado que se cocina a la perfección y nos ofrece todo su sabor en sencillas elaboraciones. Las vamos a preparar con un punto crujiente, gracias al rebozado y el sabor de una salsa con nombre propio. Esta salsa agridulce le dará a cualquier marisco el toque ideal de sabor. Toma nota de cómo se cocinan unas gambas rebozadas con salsa agridulce fáciles y deliciosas.

Ingredientes:

• 800 gr de gambas
• 2 yemas de huevo
• Pan rallado
• Aceite
• Sal
• Mostaza
• Vinagre
• Azúcar
• Hinojo
• Perejil
• Pimienta
• Aceite
• Sal

Cómo preparar unas gambas rebozadas con salsa agridulce

1. Esta receta es muy fácil de preparar, podemos usar gambas congeladas que tendremos siempre en nuestra cocina o buscar este alimento fresco, son una base que siempre queda bien. Encontrar estas gambas congeladas ya preparadas, no tiene nada que ver con el sabor que le vamos a dar, utilizaremos un rebozado convencional que las cubrirá de gloria.
2. En un cazo con agua y un poco de sal, empezamos cocinando las gambas. Con unos 5 minutos será suficiente, las gambas son un ingrediente que se cocina en muy poco tiempo y después de esta primera cocción simplemente nos aseguramos de que el rebozado quede bien.
3. Las pelamos cuando estén frías y reservamos, mientras seguimos con el rebozado. Vamos a batir las yemas de los huevos con un poquito de sal. Preparamos un plato con el pan rallado, podemos ponerle un poco de queso parmesano en polvo o darle un toque más crujiente con un poco de maíz tostado triturado.
4. Preparamos la sartén con abundante aceite. Pasamos las gambas por los huevos y por el plato del rebozado. Las vamos friendo poco a poco hasta que estén doradas, colocamos estas delicias sobre papel absorbente para que eliminen el exceso de aceite.
5. Con las gambas listas nos ponemos manos a la obra con la salsa agridulce. En un bol ponemos una cucharita de mostaza, dos cucharadas de vinagre, dos de aceite, media de azúcar, tres de agua, pimienta y sal al gusto. Batimos todo muy bien hasta que nos quede la consistencia de salsa que buscamos. Podemos ponerle un poco de perejil picado para darle color.
6. Servimos con la salsa al lado y unas rodajas de limón, el resultado será una tapa sencilla y deliciosa, muy fácil de preparar.