Opinión

El megalómano además es gafe

“Sánchez aún tiene tirón” es otra de las muchas filfas que se cuecen en los sótanos de la Moncloa con el fin de exportarlas a la UE. En España, queda poca gente que se crea los bulos del maniquí y en Bruselas, no cuela su propaganda engañosa. El fracaso bestial de la candidata de los socialistas franceses, Anne Hidalgo, alcaldesa de París, de origen gaditano, como las chirigotas, cosechó el ¡1,7%! de los votos en la primera vuelta de las elecciones gabachas porque su amigo gafe, la apoyó, demostrando el nulo tirón que tiene el presidente del Gobierno. Cuanto toca su varita mágica o apadrina su mal de ojo, irremisiblemente, se va a pique, desde la economía hasta la parisina. Sánchez simboliza el infortunio y merece figurar como ejemplo de gafe en las enciclopedias.

Pedro Sánchez no expía sus excesos… ni en Semana Santa. El Jueves Santo, Javier Tajadura, insigne catedrático de Derecho Constitucional, publicó en El Correo un artículo que revela las manías del déspota, denunciando que “el imperio de la ley ha sido reemplazado por el imperio del decreto ley, que se utiliza de forma sistemática aunque no exista urgencia objetiva alguna”. Titulado: La ruina del parlamentarismo, es toda una enmienda a la totalidad a las maneras de gobernar de este esquivo cacique. Mientras La Legión homenajea al Cristo de la Buena Muerte, el ateo se entrega a dilapidar 1,5 millones de euros, que salen de los impuestos que pagan los españoles, en acondicionar La Mareta, un exclusivo palacio de lujo en Lanzarote donde Sánchez, agotado de engañar a la gente y de hacer el ridículo, repone fuerzas y planea nuevos abusos, como gastarse otro millón largo en el palacio de Las Marismillas, sito en el extremo sur del Parque de Doñana, dotándole de un solárium digno de Nerón.

Nacido en el barrio de Tetuán, ha cogido gusto a los palacios. Este impostor  es un compendio de contradicciones. Se halla profundamente instruido en las vaguedades del ocio y adora la conversación de los eruditos, aunque no se entere de nada. Pretende sostener su dignidad y se degrada a cada paso con discursos huecos e inoportunos. Farda de defender al obrero y lo arruina constantemente. Mitad gafe, mitad megalómano, 100% injusto, ha logrado que los funcionarios le odien. Los principales sindicatos del sector público, la Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF), más el sindicato de Policía Nacional (Jupol), muy hartos de que incumpla sus promesas, han convocado una manifestación masiva, este próximo lunes, 18 de abril, para protestar por el recorte sanitario que sufren todos los agentes de España entera, en innumerables administraciones.

Pero el sátrapa, pasa, porque está muy atareado tomando el sol con espejos buscando realzar su look hortera. También le importa un bledo que los autónomos sigan pagando cuotas e impuestos cuando no pueden trabajar, debido a la crisis en la que nos han metido, estos incompetentes socialistas y esos trincones comunistas. Sánchez sólo tiene claro dos cosas, la primera se la plagió a Charles Chaplin: “La vida es placer”; la segunda, pertenece a su propia cosecha: “Hay que joder al prójimo”.