La ‘fórmula Aagesen’ para adjudicarse contratos por la cara

Qué casualidad, qué insólita coincidencia, que el 80% de las concesiones públicas a la familia de la ministra de Transición Ecológica, Sara Aagesen, fueran a través de contratos menores: aquellos otorgados a dedo que no tienen que pasar por una mesa de evaluación. Del poco más de centenar de contratos otorgados a la compañía Hottinger Brüel & Kjaer Ibérica, del hermano mayor de la ministra, 87 fueron contratos menores, cuya cuantía permite al Ejecutivo otorgarlos de forma digital. Contando tanto estos contratos menores, como los dos expedientes revelados por OKDIARIO (uno de 114.466 euros, y otro de 134.514), la cifra de concesiones a esta compañía del sector de la instrumentación acústica por parte del Gobierno del que forma parte Sara Aagesen supera ya los 2,8 millones de euros. Sin contar, obviamente, las ayudas que recibió la empresa de su marido y hermano pequeño. En total, más de 3,2 millones de euros. Contrasta, y mucho, la cuantía de las adjudicaciones durante la etapa de Rajoy: 363.000 euros. Es decir, que, con Sánchez, Hottinger Brüel ha multiplicado por ocho el valor de las adjudicaciones públicas. Harald Aagesen, hermano mayor de la ministra, es director de ventas de esta compañía desde 2020 y señala en su currículum que está vinculado a ella desde 1997. Visto lo visto, tiene su continuidad garantizada.

Los contratos menores son aquellos que se otorgan sin necesidad de un concurso público en el que tener en cuenta diferentes criterios, no sólo el precio más bajo. En su caso, responden a un valor estimado inferior a 40.000 euros cuando son contratos de obras, mientras que el valor debe ser inferior a 15.000 euros cuando se trata de contratos de suministro o de servicios, como ha ocurrido con estos expedientes concedidos a Hottinger Brüel & Kjaer Ibérica SLU, sin libre concurrencia de otras empresas. Es decir, que no compite con nadie y se adjudica los contratos de forma directa. ¿Cuál es su fórmula secreta?, se preguntarán ustedes. Pues más claro agua: la ‘fórmula Aagesen’.