Las mayores ventas en el mundo del arte

Las mayores ventas en el mundo del arte

En el año 1999, la obra del alemán Gerard Richter ‘Äbstraktes Bild’ (1986) se vendió en Sothebys por 607.500 dólares. La misma obra se vendió el pasado año por 46 millones de dólares. En 16 años el valor se ha multiplicado 76 veces. Richter es el artista vivo europeo con el mayor récord en subasta. El líder de la lista es el norteamericano Jeff Koons. Su escultura de 10 metros ‘Orange Ballon Dog'(1994-2000) alcanzó los 58,4 millones de dólares en el año 2013.

Sothebys y Christies son las dos salas de subasta que mueven la mayor cantidad de obras modernas y contemporáneas al año. Hay que hacer una distinción entre artistas vivos y artistas muertos. Los récords que se consiguen con artistas vivos están basados en la originalidad de la obra pero también tienen un importante componente de inversión. Jeff Koons es un gran artista, pocos entendidos discuten su talento, sin embargo 58 millones es una cifra irreal para un artista vivo y detrás de esa cifra no hay solo coleccionistas sino galeristas interesados en que Koons alcance estos precios. Esto no es un fenómeno nuevo, desde siempre ha ocurrido. Rembrandt en el siglo XVII era conocido por ir a subastas donde había obras suyas y pujar para subir sus precios.

En el arte contemporáneo, cuando la obra de un artista joven sube mucho en poco tiempo, ello no constituye necesariamente un factor positivo, ya que es necesario para su correcta evolución que la demanda de su obra se mantenga. Las subidas en flecha muchas veces tienen un origen artificial y con frecuencia se desinflan. Un artista que sube progresivamente tiene un mercado mas lógico y ordenado. Sin embargo, una vez que un artista llega a la categoría de estrella como Richter o Koons el precio de una obra icónica lo pone el mayor postor, ya sea inflado por su propio galerista o su mejor coleccionista. Para que la obra de un artista muerto alcance altas cifras se tienen que dar ciertas condiciones: que sea una obra de calidad sin igual,  de gran singularidad, de importancia histórica y con una excepcional procedencia. Por este termino me refiero a haber estado en manos privadas al menos 30 años y consecuentemente fuera del mercado durante este tiempo. ¡Imaginen por un momento que el Museo del Prado decide vender Las Meninas! Sin duda, la lucha por museos e importantes colecciones por hacerse con una obra de esta magnitud sería feroz.

La obra por la que más se ha pagado en subasta por un artista muerto es la obra de Picasso ‘Les femmes d’Alger’ que se subastó en mayo del 2015 en Christie´s por 179,4 millones de dólares.  La segunda obra por la que más se ha pagado en subasta fue en noviembre del mismo año en la misma casa por la obra de Giacometti ‘Un Couche’ en 170,4 millones de dólares. Predominan los récords de los artistas hombres frente a las artistas mujeres. La artista mujer con el mayor récord es la americana Georgia O´Keefe con Jimson weed/White flower No. 1 (1932) que se vendió por 44,4 millones de dólares en Sothebys en el año 2014. El comprador en esta ocasión fue un museo en Arkansas. Le sigue la también americana John Michell con «sólo» 12 millones de dólares por ‘Untitled’ (1960). Las subastas están boyantes, los mayores compradores continúan siendo los americanos, detrás van los europeos y los «países emergentes de compradores» que están tomando cada vez más presencia, estos son Rusia, India, Brasil, China y algunos países árabes.

Las grandes ventas también se hacen a nivel privado, los resultados no son públicos, pero dados los elevados precios son transacciones que acaban haciéndose publicas ya que en ellas se cuentan con mayores récords que en subasta. En al año 2015, David Geffen —fundador de Dreamworks, Asylum records, Geffen Records y DGC Records— vende a Kenneth C. Griffin —fundador de Citadel— la obra ‘Interchanged’ (1955) de Willem De Koonig por aproximadamente 280 millones de dólares. El mismo año, el suizo magnate de la inmobiliaria Rudolf Staechelin vende por unos 300 millones de dólares, según The New York Times, la obra de Paul Gaugin Nafea Faa Ipoipo  (1892) ‘¿Cuando te Casas?’ al Estado de Qatar. El tercer récord de venta privada fue en el año 2011, la obra ‘Les joueurs de cartes’ de Cezanne (1890-1895) la vendió el naviero griego George Embiricos al Estado de Qatar por 250 millones de dólares. Veremos que nuevos récords nos depara el 2017…

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