Comportamientos del gato que son síntomas de problemas cutáneos

Si eres dueño de un gato, ya habrás notado que acicalarse es su pasatiempo favorito. Probablemente, ocupe un 50% de su tiempo en hacerlo, y el resultado tiene que ser una piel lisa, sin enrojecimientos, descamaciones o cualquier otro signo de irritación. Si descubres manchas rojas, granos, costras, llagas abiertas o parches sin pelo, tu gato puede estar sufriendo de alguna enfermedad de la piel y necesita tratamiento. Pero si no acostumbras revisar su pelo, puedes notarlo con algunos comportamientos repetitivos o compulsivos, los que adoptan los felinos ante estas molestias.

Síndromes compulsivos en los gatos

Los síndromes compulsivos o los llamados comportamientos repetitivos anormales (ARB, por sus siglas en inglés), se trata de un grupo bastante diverso de síntomas, de orígenes muy diversos, que pueden sufrir los gatos.

Si tu gato se rasca constantemente, puede desprender su pelo y lastimar su piel. Probablemente pueda encontrarse una explicación o una causa médica que lo condiciona, pero su estado de ánimo también puede generar estos comportamientos extraños.

El estrés también presenta síntomas y los cambios en el comportamiento pueden incrementarse y prolongarse en el tiempo debido a ciertos trastornos psicológicos, neurológicos, hormonales o a cambios en el sistema inmunitario.

Atención al comportamiento del felino

Los síndromes compulsivos son anormales, repetitivos y muy variados. Pero si tu gato se autolesiona al lamerse, o se persigue insistentemente la cola, puede sentirse frustrado o deprimido, lo cual puede tener consecuencias graves. Probablemente esté intentando conseguir algo y, por diferentes motivos, aún no ha podido lograrlo.

Debes prestar atención al comportamiento de tu gato y comprobar que cumple con sus rituales de costumbre. Si ves que se rasca más insistentemente que lo normal, o lo notas más nervioso, puede tener algún problema en su piel que le está molestando.

En ocasiones, el comportamiento de los gatos cambia por alguna modificación de su dieta, que le provoca alergia y problemas en la piel.

El estrés afecta directamente al sistema inmunitario y si ese mecanismo de defensa se debilita, puede causarle una dermatitis inflamatoria, a una enfermedad intestinal, una infección respiratoria o del tracto urinario. Si tu gato tiene problemas de digestión, como vómitos o diarrea, también puede tener problemas en la piel.

Infecciones comunes de los gatos

Las infecciones fúngicas son las más comunes, y la Tiña y la Candidiasis son dos posibles causas de los problemas de la piel que pueda tener tu gato.

Los gatos son muy propensos a parásitos y virus, de igual manera que los seres humanos, por lo que es recomendable que prevengas estas enfermedades dándole a tu mascota medicamentos específicos contra pulgas y garrapatas, principalmente.

Pídele consejo a tu veterinario sobre las infecciones más comunes entre los gatos y cuáles son sus síntomas.

¿Quieres dejar tus consejos sobre las causas cutáneas de los comportamientos compulsivos de los gatos? Hazlo, y comparte en tus redes esta información ayudar a los dueños de gatos a identificar estas enfermedades.