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Cómo superar un amor no correspondido

Amar sin ser amado no siempre se supera fácilmente

Tener un amor no correspondido es una de las peores situaciones que nos puede tocar vivir en el plano sentimental, ya que no poder tener una relación con la persona que amas mata tus ilusiones y es muy difícil de superar. Si quieres saber cómo superar un amor no correspondido, sigue leyendo y verás algunas claves para que puedas lograrlo y mirar hacia adelante con positividad.

A todos nos ha pasado alguna vez en la vida que nos enamoramos de una persona que no nos corresponde, quizás en la adolescencia, quizás ya siendo adultos, pero en algún momento lo hemos vivido. Cuando te toca parece el fin del mundo, pero lo cierto es que cuando lo superas incluso te ríes de la situación. Más se pierde esa persona por rechazar un amor tan puro y bonito, tendrás a la vuelta de la esquina otra persona que sí querrá hacerte feliz.

Claves para superar un amor no correspondido

Céntrate en ti

Cuando tenemos una desilusión amorosa solemos centrar nuestros pensamientos en esa persona y nos descuidamos por completo, incluso a nivel higiénico, y eso es algo que bajo ningún concepto se puede permitir. No puedes pasar página de un día para otro, pero tampoco abandonarte, ni un solo día, ya que tu prioridad en tu vida debes ser tú, no esa otra persona.

Pensamiento positivo

No es sencillo buscar algo positivo en el hecho de que no te corresponda de quien te has enamorado, pero no te centres en comentarios ni pensamientos negativos sobre el amor, en el dolor que te produce la situación. Que te suceda esto ahora no quiere decir que tu futuro será así, que no tendrás a alguien especial porque solo quieres y deseas a esa persona.

Relaciónate con otros

Busca la conexión con otras personas, ya sean conocidas o desconocidas que puedan entrar a formar parte de tu círculo. Conecta con otras personas para poner distancia sentimental entre tu amor no correspondido y tú. No se trata de enamorarte de otra persona sino de centrar tu afectividad y atenciones en otros, que pueden ser familiares o amigos, no necesariamente nuevos amores.