Hamás libera a otras dos rehenes israelíes: una mujer de 80 años y otra de 85

El grupo terrorista de Hamás ha liberado este lunes a dos rehenes más, dos ancianas, Nurit Cooper, de 80 años, y Yocheved Lifshitz, de 85, con doble nacionalidad, ambas secuestradas en el kibutz Nir Oz el pasado 7 de octubre en la masacre, según ha confirmado Israel. Las dos mujeres, que fueron secuestradas con sus maridos, los cuales siguen secuestrados por el grupo terrorista de Hamás, fueron entregadas a la Cruz Roja (CICR), que las llevó al paso fronterizo de Rafah en Egipto, donde fueron recibidas por funcionarios israelíes.

Yocheved Lifshitz, de 85 años, reconoció que vivió un «infierno que nunca conocimos y que nunca pensamos que viviríamos» al describir el desgarrador asalto del 7 de octubre a su kibutz por los terroristas de Hamás y el terror de ser tomada como rehén en la Franja de Gaza.

«Invadieron nuestras casas, golpearon a la gente y a algunos les hicieron rehenes», indicó Lifshitz, hablando en voz baja desde una silla de ruedas mientras informaba a los periodistas el martes en el Hospital Ichilov de Tel Aviv, un día después de que Hamás la liberara a ella y a Nurit Cooper, de 80 años. «No les importaba si eran jóvenes o viejos», explicó.

Siguen las conversaciones para liberar al resto de rehenes, que se están produciendo en múltiples frentes a través de varios intermediarios. Entre ellos, destacan el ex jefe del Mossad Yossi Cohen o Ronen Levi, que sirvió durante casi 30 años en las comunidades de inteligencia y defensa y tiene gran número de contactos en Qatar y otros países del Golfo.

Rehenes a cambio de combustible

La liberación de los rehenes se ha marcado en rojo no sólo para el primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, sino también para el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, debido a que muchos rehenes tienen doble nacionalidad.

En Washington, el portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de Estados Unidos, John Kirby, ha reconocido que el presidente estadounidense, Joe Biden, y su administración se habían comprometido a garantizar la liberación de todos los rehenes. «Vamos a trabajar para hacer todo lo posible por liberar a los rehenes. Deben ser liberados inmediatamente; no hay razón para que estén retenidos en primer lugar», ha reconocido a los periodistas en el Centro de Prensa Extranjera.

En los últimos días, el grupo terrorista ha mantenido conversaciones con Israel a través de Qatar, donde viven los líderes terroristas de Hamás, y Egipto, sobre una propuesta para liberar a un grupo más numeroso a cambio de un flujo constante de ayuda humanitaria, incluido combustible. Una posibilidad, a la que ha puesto condiciones Tel Aviv, ya que quieren que se liberen a todos los rehenes antes de realizar la primera entrega de combustible.

Un asunto personal para Netanyahu

La cuestión de liberar a los rehenes secuestrados por Hamás es un asunto personal para Netanyahu, debido a que su hermano murió al frente de la Operación Entebbe, una misión contraterrorista de rescate de rehenes en Uganda en 1976.

Por ello, el primer ministro de Israel habría retrasado la operación a gran escala de entrada a Gaza, que tienen prevista como segunda fase dentro de la respuesta con Operación Espadas de Hierro tras la masacre de Hamás el pasado 7 de octubre, orquestada por Irán, en la que asesinaron y secuestraron a cientos de personas.

Los rehenes, que Hamás tiene como escudos humanos, se encontraría en los túneles de Gaza, conocidos como el metro de Gaza, fortaleza subterránea terrorista con docenas de puntos de acceso repartidos por toda Gaza. El grupo terrorista de Hamás tiene estos túneles como depósitos de armas, búnkeres, centros de mando y arteria de transporte oculto de terroristas y armas, incluidos lanzacohetes.

Son unos pasadizos que conducen de forma directa de Gaza a comunidades israelíes cercanas a la frontera, lo cual permite a los terroristas de Hamás infiltrarse, secuestrar y atacar a civiles israelíes.