Internacional

Dastis compromete a España en un proceso de paz entre israelíes y palestinos

El ministro de Asuntos Exteriores, Alfonso Dastis, y su homólogo palestino, Riad al Maliki, han coincidido hoy en la necesidad de reactivar las conversaciones que lleven a una «paz duradera» entre israelíes y palestinos y han hecho votos para que la administración estadounidense se implique en buscar una solución.

Dastis y Maliki se han reunido hoy en el Palacio de Viana, sede del Ministerio, para tantear las expectativas sobre la reanudación del proceso de paz entre Palestina e Israel tras la reciente visita a mediados del mes de mayo del presidente de EEUU, Donald Trump.

Israel y Palestina fueron dos etapas de gran valor simbólico en el primer viaje al extranjero de Trump, que se comprometió a apoyar un proceso de paz para la región.

Tal y como se esperaba, Trump evitó mencionar en todas sus intervenciones la solución de dos Estados, hasta ahora la única impulsada por la Administración estadounidense y la comunidad internacional, pero tampoco propuso un plan alternativo y se limitó a asegurar que la paz es «difícil pero posible» y que los líderes israelíes y palestinos se han mostrado dispuestos a alcanzarla.

«Hemos hecho votos para que la nueva administración de Estados Unidos se implique, como ya lo está haciendo, para encontrar una solución que siempre va a contar con el respaldo de España y de la Unión Europea», ha destacado Dastis en una declaración sin preguntas, antes de volver a apostar por la solución de los dos Estados, «la única viable».

Maliki también ha dicho estar de acuerdo con ese interés de Trump por iniciar «una recolección de esfuerzos pasados para poder renovar un proceso que debe llevarnos a una paz duradera».

En el plano político, además de las perspectivas del proceso de paz, los ministros han hablado del proceso de cooperación interpalestina.

Los dos ministros tenían previsto abordar también la difícil situación de la economía palestina, para la que el Fondo Monetario Internacional (FMI) ha identificado tres amenazas: el estancamiento económico, la fragmentación territorial y la caída de la ayuda internacional.

En 2016 la cooperación internacional con Palestina —761 millones de dólares— representó un 5,6% de su PIB, desde del 32% que llegó a representar en 2008. España aportó 215 millones de euros en cooperación y ayuda humanitaria a Palestina entre 2010 y 2017.

La economía palestina creció un 4% en 2016 y se prevé que crezca un 3% en 2017, pero el FMI lo ve insuficiente para una región que tiene cifras de paro del 17% en Cisjordania y el 40% en Gaza.

De hecho, según fuentes diplomáticas, ambos preveían departir sobre la preocupante situación de la franja de Gaza, donde hay escasez de agua y también de electricidad —ahora mismo, sólo cuatro horas al día—.