Cómo hacer que te baje la regla

Los ciclos menstruales pueden ser variables, y aunque en muchos casos se predice con exactitud el día de comienzo, en otros se suele retrasar sin motivo aparente. Si quieres hacer que te baje la regla porque no lo ha hecho de forma natural, sigue leyendo y toma nota de unos cuantos trucos caseros para hacerlo con eficacia.

Que la regla se retrase o adelante unos días no debe ser motivo de preocupación salvo que tengas dudas sobre un posible embarazo, un viaje que hayas programado o una ocasión especial.

¿Qué puede causar un retraso menstrual?

El estrés es una de las principales causas que pueden provocar un retraso en la menstruación, además de la ansiedad, la fatiga o los altibajos emocionales. Tener el síndrome de ovarios poliquísticos suele afectar también a la menstruación, por lo que si sufres retrasos habitualmente es recomendable visitar a un especialista que te realice las pruebas oportunas.

Trucos para hacer que te baje la regla

1. Bolsas térmicas: el calor hace que los músculos uterinos se relajen, por lo que colocar bolsas térmicas en la zona de los ovarios puede provocar que baje la regla.
2. Baño de agua caliente: al ser el calor de gran ayuda, los baños de agua caliente también favorecen la dilatación en las venas y relajan los músculos, por lo que la sangre fluye mejor. El truco será más efectivo si añades al agua unas rodajas de limón y una rama de romero.
3. Hacer ejercicio: la actividad física moderada hace que tu cuerpo funcione mejor, tanto a nivel físico como mental. Además, el ejercicio facilita la circulación sanguínea, incluyendo en los ovarios y la zona pélvica.
4. Alimentación: el tipo de alimentación que sigas puede influir también para regular los ciclos menstruales. Es recomendable incluir en tu dieta alimentos que sean ricos en caroteno, como zanahoria, calabaza, papaya, mostaza, huevos, espinacas o albaricoques, entre otros. Además, el zumo de naranja y cualquier alimento rico en vitamina C también será muy positivo para hacer que te baje la regla.
5. Sodio: evita alimentos que sean ricos en sodio, por ejemplo la sal, ya que al acumular líquidos el cuerpo puede responder retrasando la menstruación.
6. Infusiones: hay infusiones que pueden ser de gran ayuda en este sentido, como la infusión de salvia (ayuda a regular el sistema hormonal), infusión de perejil (mejora el flujo sanguíneo), el té de Angélica (estimula el útero y desinflama el abdomen) o el té de clavo (estimula los músculos del útero).
7. Aceites de Onagra: es muy eficaz a la hora de aliviar los dolores menstruales, y también para regular la menstruación y, en general, los desajustes hormonales.
8. Gingseng: actúa con eficacia sobre el aparato sexual femenino para darle regularidad a sus ciclos y aliviar los dolores menstruales y otros síntomas propios de esta situación.
9. Relaciones sexuales: sí, el sexo también puede ser de gran ayuda para hacer que te baje la regla. El acto sexual aumentará el flujo de sangre en el útero y en la vagina, y también el útero se contraerá después del orgasmo, lo que también puede ser favorecedor para que comience la menstruación.

Mitos sobre la regla

En torno a la menstruación hay muchas falsedades que se han extendido y que se supone que no puedes hacer teniendo la regla pero no es así:

• No te puedes quedar embarazada teniendo la regla. No suele ser habitual, pero sí es posible.
• No debes ducharte, bañarte o lavarte el cabello.  No solo es falso sino que precisamente lo recomendable es que la higiene esté mucho más presente en esos días.
• No puedes beber bebidas frías.
• Se mueren las plantas si las tocas.
• Te sientes más débil por la pérdida de sangre.

¿Cuáles son los síntomas de la menstruación?

Todo el mundo sabe que el sangrado es el principal síntoma de la menstruación, pero antes de que te baje, e incluso después, se pueden tener también otros. Es curioso que muchas mujeres siempre tienen otros síntomas mientras otras nunca han tenido ninguno más que el propio sangrado. Veamos los síntomas más habituales:

• Calambres abdominales
• Calambres en la pelvis
• Dolores en la parte baja de la espalda
• Pechos hinchados y doloridos
• Cambios en el estado de ánimo
• Irritabilidad
• Dolor de cabeza
• Fatiga
• Ansiedad por comer