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Rabat quiere que Sánchez verbalice su cambio sobre el Sáhara para presionar a Francia a hacer lo mismo

Macron es el último escollo de Marruecos para lograr el pleno reconocimiento internacional a su plan sobre el Sáhara

  • Joan Guirado
  • Corresponsal de Gobierno y Casa Real. Siguiendo la actividad del presidente y líder del PSOE, Pedro Sánchez, y del Rey de España. También política catalana.

Francia es el último escollo de Marruecos para hacerse con el control total del Sáhara con pleno reconocimiento internacional, tras el cambio de posición histórico de Pedro Sánchez. Y Mohamed VI, para lograr su objetivo, usará al presidente del Gobierno para ablandar al francés Emmanuel Macron. Rabat espera que el jefe del Ejecutivo, durante la visita de este miércoles a la capital marroquí, verbalice con su propia voz el reconocimiento a la marroquinidad del Sáhara.

Tras los últimos cambios en el Gobierno francés, con el nombramiento de Stéphane Séjourné como nuevo ministro de Exteriores, Rabat quiere aprovechar la coyuntura para desbloquear las reticencias de Macron. Séjourné ya ha manifestado su intención de iniciar «un nuevo capítulo» en su relación con Marruecos, por lo que el gobierno alauí considera que esta es la mejor oportunidad. Cuenta con el apoyo de Macron para eso.

Según el ministro galo, «el presidente de la República me ha pedido personalmente que me implique en la relación franco-marroquí y escriba también un nuevo capítulo en nuestra relación», reconoció hace unos días Séjourné, jefe de la diplomacia francesa la desde el pasado 12 de enero. Esa nueva relación sólo será posible si el Elíseo da un paso hacia adelante en el reconocimiento de la marroquinidad del Sáhara.

Séjourné explicó que hará «todo lo posible en las próximas semanas y meses para que Francia y Marruecos se acerquen». Unas declaraciones que no pasaron desapercibidas en el reino alauí. A partir de ahí, de forma muy rápida, Rabat activó la maquinaria para aceptar la visita que Pedro Sánchez venía reclamando desde hace meses. Para aprovechar el pronunciamiento público del presidente español para presionar a Macron. Al líder del PSOE, además, jugar este papel le interesa de cara a su futuro comunitario.

Hace casi dos años, en marzo de 2022, Sánchez trató de solucionar meses de desencuentros con Marruecos reconociendo la pertenencia del Sáhara a ese país. A través de una carta enviada al rey Mohamed VI, en la que reconocía el plan de autonomía para el Sáhara Occidental planteado por Marruecos en 2007, el presidente del Gobierno dio un giro de timón histórico en la posición española. Sánchez reconocía entonces «la importancia de la cuestión del Sáhara para Marruecos» y subraya «los esfuerzos serios y creíbles» que está realizando el reino para lograr una solución en el marco de la ONU.

Ese gesto le costó a Pedro Sánchez una importante crisis interna con sus socios de Podemos. Ahora, con Yolanda Díaz debilitada, tras no lograr ni un solo escaño en las pasadas elecciones gallegas, el jefe del Ejecutivo quiere aprovechar la situación para contentar aún más a Marruecos y erigirse como el principal defensor del plan marroquí sobre el Sáhara. De cara a que otros líderes europeos, en especial Emmanuel Macron, acaben tomando la misma decisión y Rabat pueda zanjar definitivamente la cuestión.

Las peticiones de Sánchez a Marruecos

Más allá de la cuestión del Sáhara, una de las carpetas que Pedro Sánchez llevará bajo el brazo a Marruecos es la reapertura de la aduana de Melilla, cerrada unilateralmente por Marruecos en 2018, y la apertura de una nueva en Ceuta, donde no había existido hasta ahora. Se trata de uno de los acuerdos que alcanzaron Sánchez y Mohamed VI durante el último encuentro que mantuvieron hace cerca de dos años.

Desde el Gobierno aseguran tenerlo todo listo para que se pueda producir la apertura y no se considera que sea necesario realizar más pruebas piloto como las realizadas en enero, febrero y mayo de 2023. Desde entonces la cuestión está paralizada. Pues en Marruecos dicen que pese a estar comprometidos con esta cuestión, aún tienen algunos aspectos técnicos que resolver. Confían en que «en los próximos meses» se pueda alcanzar «este objetivo común».

El incremento de las llegadas de inmigrantes en el último año, en particular a Canarias, también será una de las cuestiones que el presidente del Gobierno planteará a Marruecos pese a valorar «la buena cooperación que hay en esta materia». El jefe del Ejecutivo también reclamará más implicación de las autoridades marroquíes para resolver el uso del aeropuerto de Barajas por parte de marroquíes para entrar a España como pasajeros en tránsito y pedir asilo en nuestro país. La Policía ha denunciado la situación de hacinamiento.