La alcaldesa de Gerona da 9.000 € públicos a la ANC y afines a la CUP para cenas separatistas
La concesión de estas subvenciones fueron mediante un decreto y su aprobación en una junta de gobierno local
La alcaldesa de Gerona que usa coche oficial para ir al Parlament ahora se pondrá escolta policial
En Gerona, jugar a levantar una torre de cajas de cerveza para después escalarla tiene premio: 4.000 euros. Es la cantidad con la que la alcaldesa, Marta Madrenas (PDeCAT), ha subvencionado al ‘casal independentista El Forn’, muy cercano a la CUP, para la organización del ‘Foc a la Feixa’, una verbena popular en la orilla del río Ter con actividades, música y una cena de pago.
La subvención, junto a otra de 5.000 euros con la ANC como beneficiaria, para la celebración de una cena amarilla en apoyo a los presos independentistas, se otorgaron mediante un decreto aprobado en el transcurso de la celebración de una junta de gobierno local, celebrada el 27 de julio, como subvenciones de actividades culturales complementarias a la oferta municipal para el año 2018, pese a que ambas actividades tienen un marcado carácter político.
En el caso de la actividad organizada por el ‘casal independentista El Forn’, además de hacer construcciones con cajas de cerveza y subir luego encima, también organizaron un torneo de fútbol y de petanca, un chill out reggae o los conciertos de ‘Bigblack Rhino’, ‘Marron Town’, ‘La Sra. Tomasa’ y ‘Dj Campa’. La cena de esta verbena, que constaba de ensalada, arroz, coca de Sant Joan, agua y vino, tenía un precio de 10 euros con entrada anticipada y trece si se compraba el mismo 24 de junio, pese a que recibieron suculenta subvención pública.
Ese mismo día, celebración de la verbena de Sant Joan en Cataluña, la ANC también organizó una verbena amarilla, en los jardines de Fora Muralla, con una cena popular al precio de 18 euros la entrada, más un euro del vaso amarillo, con música y baile a cargo de Ovella Xao. La actividad, organizada por ‘Girona Vota’ pero subvencionada a la ANC, destinó todos los beneficios de la verbena pagada con dinero público a la caja de solidaridad de los «presos políticos y exiliados». La celebración se promocionó como «el primer solsticio de la república».
La concesión de estas subvenciones fueron mediante un decreto. Su aprobación en una junta de gobierno local permite otorgarlas con cierta agilidad y sin necesidad de pasar por el pleno del ayuntamiento, donde la oposición puede fiscalizar la idoneidad o no del interés público de las actividades subvencionadas. La información sobre dichas subvenciones, llega al resto de partidos representados en el consistorio a posteriori.
El PP, indignado
La concejal del PP en el ayuntamiento, Concepcio Veray, está indignada por la permisividad del equipo de gobierno respeto al uso de los espacios públicos. Veray lamenta que hace unas semanas no se permitiera colgar una pancarta a una entidad de personas con enfermedades congénitas con la excusa de que no se pueden hacer actividades en las inmediaciones del río Oñar, para posteriormente permitir «el indecente montaje» de las cruces independentistas en el césped del río, sin recibir ninguna amonestación.
Lo último en Cataluña
-
El socialista Collboni, peor que Colau: desplaza el belén de Barcelona por una estrella de 20 puntas
-
Despedida por «acoso muy grave» la alto cargo de Transportes de Barcelona encargada de Buen Gobierno
-
Puigdemont vuelve a la presidencia de Junts con el apoyo del 90% de la militancia
-
Illa nombra ‘embajador’ del catalán al profesor Cabal Guarro, que define España como «inmensa mierda”
-
Illa cede al chantaje separatista y defiende la expulsión a la Policía de su sede central en Barcelona
Últimas noticias
-
Siete condenados por humillar en grupo a un homosexual, arrojarlo a una fuente y orinar sobre él
-
García Ortiz y su fiscal bromearon con añadir «un poquito de cianuro» a la nota contra el novio de Ayuso
-
Trump frente al «dogma ‘woke’ de la corrección política»
-
Todo sobre Kira Miró: su edad, su trabajo, su pareja, hijos…
-
Los barrios de Madrid que odian los madrileños: jamás querrás vivir en ellos