Economía

Santander y Sabadell tiemblan ante el posible éxito de los independentistas en Escocia

La ministra principal escocesa, Nicola Sturgeon, quiere convocar un nuevo referéndum sobre la permanencia de Escocia en Reino Unido. Ante la posible salida, el mercado coincide en que las empresas más afectadas del Ibex 35 serían las relacionadas con el sector financiero y especialmente el Banco Santander y el Sabadell.

“Hay que tener en cuenta que tanto TSB (filial inglesa de Sabadell) como Santander UK operan en Escocia, lo que podría generar tensiones respecto a la libra, y una posible conversión del euro en la zona”, explica Guillermo Leal, analista de Conecta Capital.

Además de Sabadell y Santander, los analistas coinciden en que las compañías españolas que más acusarían una depreciación de la libra son precisamente las que más sufrieron con el Brexit: IAG, Iberdrola y Ferrovial. El argumento de la principal ministra escocesa para repetir el referéndum se fundamenta en que en la última consulta, los escoceses votaron pensando que continuar en Reino Unido era seguir en la Unión Europea

La libra esterlina podría devaluarse aún más porque: “La convocatoria de otro referéndum en Escocia sería un foco adicional de incertidumbre dentro del proceso del Brexit”, asegura Felipe López-Gálvez, analista de Self Bank.

Según Gisela Turazzini, co-fundadora de Blackbird, habría que analizar bien las nuevas circunstancias de Reino Unido, puesto que tras el Brexit han cambiado muchas cosas. “Las posibilidades de que la independencia de Escocia se haga realidad, es un hecho bastante evidente. Primero, por el sentimiento nacionalista y segundo, por el claro europeísmo de los escoceses, como se demostró en el resultado del Brexit”, afirma la analista.

Desde Self Bank explican que, a nivel local, las compañías que más volatilidad podrían registrar son las empresas escocesas que forman parte el FTSE, como Royal Bank of Scotland.

En el caso de que se convoque un referéndum y los escoceses decidiesen independizarse de Reino Unido una de las mayores incógnitas es si esa región seguiría utilizando la libra esterlina como divisa. Ante esto, López-Gálvez explica que si dejan de estar bajo el amparo del Banco de Inglaterra, se crearía un nuevo Banco de Escocia que tendría dos posibilidades: «Operar de manera independiente con una divisa propia (como hacen a día de hoy países como Suecia, Dinamarca o Reino Unido hasta que se desvincule totalmente de la U.E.) o solicitar su integración en la Unión Monetaria, de manera que los escoceses utilizarían el euro (como sucede en Irlanda sin ir más lejos)», concluye el analista.