Economía
Declaración de la renta

Cambio radical en tu declaración de la renta: la deducción de 1.300 euros que no conocías

Si tienes hipoteca antes del año 2013, la podrás incluir en tu declaración de la renta

Confirmado el cambio en la declaración de la renta

Adiós a la declaración de la renta en 2025

Cuando comienza la campaña o la temporada de la declaración de la renta siempre se generan dudas entre los contribuyentes, especialmente cuando se trata de encontrar maneras de reducir los impuestos que debemos pagar. Con cada nueva campaña, la Agencia Tributaria introduce cambios y actualizaciones que pueden marcar la diferencia en el resultado final. En este contexto y si tenemos en cuenta la campaña que arranca el próximo 2 de abril, hay una deducción poco conocida que permite a muchos ciudadanos ahorrar hasta 1.300 euros, pero no todos saben que pueden acogerse a ella.

Este beneficio fiscal está relacionado con la vivienda y sólo aplica a quienes cumplen ciertos requisitos. Aunque la deducción por compra de vivienda desapareció hace años, aún existe un régimen transitorio que permite a determinados contribuyentes seguir disfrutándola. Si compraste tu casa hace más de una década y aún estás pagando la hipoteca, es posible que puedas reducir notablemente lo que debes pagar a Hacienda en tu declaración de la renta. Aprovechar esta deducción es fundamental para quienes cumplen las condiciones, pero muchos desconocen que pueden aplicarla en su declaración. Por ello, conviene conocer los detalles y comprobar si es posible beneficiarse de este ahorro fiscal antes de presentar el borrador. La diferencia en el resultado final puede ser significativa y marcar la diferencia entre pagar más impuestos o recibir una devolución mayor.

¿Quiénes pueden aplicar esta deducción en la declaración de la renta?

No todos los contribuyentes pueden beneficiarse de esta ventaja fiscal. La deducción por inversión en vivienda habitual desapareció en 2013, pero aquellos que ya se acogieron a ella antes de esa fecha pueden seguir aplicándola bajo ciertas condiciones. Para ello, se deben cumplir los siguientes requisitos:

Si se cumplen todas estas condiciones, se puede seguir disfrutando de esta deducción en la declaración de la renta, algo que puede suponer un importante alivio fiscal.

¿Cuánto dinero puedes ahorrar con esta deducción?

El importe que se puede deducir varía en función de la cantidad destinada al pago de la hipoteca y los tipos aplicables. En términos generales, la base máxima sobre la que se puede aplicar la deducción es de 9.040 euros anuales. Sobre esa cantidad, se establece un porcentaje de desgravación compuesto por dos tramos:

Esto significa que la deducción máxima que se puede obtener ronda los 1.300 euros anuales, siempre y cuando se haya alcanzado la base de 9.040 euros en pagos de la hipoteca y otros gastos asociados.

¿Qué gastos puedes incluir en la deducción?

Para calcular la base de esta deducción, se pueden incluir no sólo las cuotas del préstamo hipotecario, sino también otros gastos relacionados con la compra o construcción de la vivienda. Entre ellos, destacan:

Es importante que los contribuyentes que cumplen las condiciones revisen toda la documentación y comprobar que estos gastos estén correctamente registrados para poder aplicarlos en la declaración sin problemas.

¿Cómo aplicar la deducción en el borrador de la renta?

Muchos contribuyentes desconocen que pueden seguir aplicando esta deducción, por lo que es fundamental revisar detenidamente el borrador de la declaración antes de confirmarlo. La Agencia Tributaria suele incluir esta deducción de manera automática si ha sido aplicada en años anteriores, pero siempre conviene verificar que los datos sean correctos.

En caso de que la deducción no aparezca reflejada, se puede añadir manualmente en el apartado correspondiente a la inversión en vivienda habitual. Además, es recomendable guardar toda la documentación que acredite los pagos realizados, ya que Hacienda podría requerir justificantes en caso de revisión.

Ahora ya lo sabes entonces, si todavía te encuentras pagando la hipoteca de una vivienda adquirida antes de 2013, esta deducción puede ayudarte a reducir la cantidad de impuestos a pagar o aumentar la devolución que recibas. Aunque muchas personas desconocen su existencia, se trata de un beneficio fiscal que sigue vigente para quienes cumplan con los requisitos establecidos.

Antes de presentar la declaración, es fundamental revisar el borrador y asegurarse de que esta deducción ha sido aplicada correctamente. Un pequeño detalle como este puede marcar una gran diferencia en el resultado final y permitir un importante ahorro en la campaña de la renta.