La actividad de las fábricas españolas sigue en contracción por la inflación y la caída de los pedidos
La actividad de las fábricas españolas se mantuvo en territorio de contracción en el mes de septiembre ante el contexto de inflación y una demanda «indecisa», según recoge el índice de gerentes de compra (PMI, por sus siglas en inglés), elaborado por S&P Global y publicado este lunes.
En concreto, el índice se ha situado en los 49 puntos en el noveno mes del año, lo que supone un descenso de nueve décimas respecto al dato de 49,9 enteros de agosto. Cualquier dato por debajo de los 50 puntos supone contracción de la actividad, mientras que si se sitúa por encima equivale a expansión.
S&P Global ha indicado que las fábricas tuvieron un mes «difícil» en septiembre debido a que la producción y los nuevos pedidos descendieron por la demanda y la inflación. Además, se registraron descensos en el nivel de empleo y la confianza a futuro descendió.
«El declive de los nuevos pedidos recibidos fue especialmente llamativo, y dado que las empresas también experimentaron un aumento simultáneo de los stocks de productos terminados, las perspectivas de producción a corto plazo son claramente moderadas», ha indicado el director económico de S&P Global Market Intelligence, Paul Smith.
La producción de las fábricas registró en septiembre su mayor descenso desde junio de 2020 ante una caída de las ventas que estuvo «entre las más grandes desde los confinamientos iniciales por la pandemia en la primavera de 2020».
La disminución de la producción y los nuevos pedidos llevaron a las empresas a reducir su actividad de compras en septiembre. La actividad de compras cayó por cuarto mes consecutivo y las empresas prefirieron, en la medida de lo posible, utilizar los stocks existentes para la producción. En este sentido, las fábricas también optaron por reducir sus plantillas.
La confianza de los gerentes de compras a futuro se volvió negativa por primera vez desde mayo de 2020 debido a la incertidumbre económica, la elevada inflación y el menor consumo.
También cae en la eurozona
La actividad manufacturera en el conjunto de la eurozona volvió a registrar un nuevo descenso en el mes de septiembre, situándose en su peor nivel en los últimos 27 meses, es decir, desde que empezó la pandemia global del Covid-19, según se desprende del índice de gerentes de compras (PMI, por sus siglas en inglés), elaborado por S&P Global y publicado este lunes.
En concreto, el índice se situó en septiembre en los 48,4 puntos, desde los 49,6 enteros observados en agosto. La firma ha atribuido el descenso a las caídas de producción y de los nuevos pedidos. Además, en algunos casos los volúmenes de producción se redujeron en respuesta a los altos precios de la energía.
«La horrible combinación de un sector manufacturero en recesión y crecientes presiones inflacionistas aumentará aún más la preocupación sobre las perspectivas de la economía de la zona euro», ha apostillado el economista jefe de S&P Global Market Intelligence, Chris Williamson.