El Real Madrid comienza la semana más importante del año. Tras 10 meses y 18 días de duro trabajo, los hombres de Carlo Ancelotti están donde querían. Mientras el resto de equipo europeos ya viven de vacaciones, hay cuatro conjuntos que todavía tienen que jugar finales europeas. Dos son la Roma y el Feyenoord, que se juegan el miércoles el primer título de la Conference League, y los otros dos son el Liverpool y los blancos, que el sábado disputarán en París el partido de los partidos. La final de la Champions League, donde unos buscarán la Decimocuarta y los otros la Séptima corona continental.
El Real Madrid afronta la última semana de trabajo del año con todos los conocimientos adquiridos, por lo que durante los próximos cinco días Ancelotti aprovechará para repasar conceptos, poner a punto a sus futbolistas y centrarse en el duelo ante el Liverpool. Desde que los blancos ganaron la Liga han tenido la oportunidad de hacer una pequeña pretemporada en la que han gozado de tiempo para poner las piernas a tono, recuperar a jugadores lesionados, dar descanso a hombres como Benzema o Vinicius y aprovechar las últimas jornadas de Liga para que todos los futbolistas lleguen a París con ritmo competitivo.
Pendientes de Alaba
Todas las miradas en los primeros días de esta semana apuntarán a David Alaba. El austriaco no juega desde la ida de las semifinales de la Champions que midieron a Manchester City y Real Madrid. Aquella noche sólo pudo disputar 45 minutos tras forzar. Recayó de su dolencia en el abductor y no ha vuelto a participar en un partido. La idea era que reapareciese ante el Betis, pero una sobrecarga le dejó fuera de la convocatoria. En principio debería comenzar a trabajar al mismo ritmo que sus compañeros y, salvo sorpresa, estará en la final.
Ancelotti ha dejado claro que tiene decidido el once inicial de la final. Si Alaba está bien formará en el centro de la defensa junto a Militao y la única duda para el público y el periodismo, no para el italiano, es si comenzará de inicio Fede Valverde o Rodrygo. Ante el Betis jugó el brasileño, pero todo apunta a que en la gran final será el uruguayo el que comience de inicio.
El jueves, a París
El Real Madrid trabajará durante cuatro días en Valdebebas. El lunes, el miércoles y el jueves se ejercitarán con normalidad en la ciudad deportiva madridista, donde tienen todas las comodidades. El martes será una jornada especial, ya que se celebrará el Media Day de la final. Ancelotti y sus hombres atenderán a los medios de comunicación, que durante un día romperán la tranquilidad que se respira habitualmente en el búnker madridista.
El Real Madrid partirá hacia París el jueves sobre las 16:00 horas. Por la mañana entrenarán en Valdebebas, comerán todos juntos y pondrán rumbo a la capital de Francia. Ya en tierras galas, se concentrarán en el hotel Aubergue du Jeu de Palme. Allí descansarán hasta el viernes, cuando se ejercitarán en el Stade de France. El sábado repetirán el proceso para jugar la final y, tras el encuentro, regresarán a la capital de España quién sabe si con la Decimocuarta.