El fichaje de un base de campanillas es un movimiento prioritario en el Real Madrid. Los blancos soñaron con Micic, que se marchará a la NBA, y avanzaron en la llegada del norteamericano Pierria Henry, procedente de Baskonia. Sin embargo, tras la marcha de Luca Vildoza a los New York Knicks, el equipo vitoriano ha cambiado sus condiciones con respecto a Henry, lo que lleva al Madrid a moverse hacia otra operación que ya está encarrilada, la de Nigel Williams-Goss.
El base norteamericano, de 26 años, ha explotado definitivamente en su segunda aventura en Europa, en las filas del Lokomotiv Kuban Krasnodar. Como informó Eurohoops, las negociaciones para su llegada a Valdebebas están encarriladas y se han avanzado desde la visualización de problemas para cerrar el fichaje de Henry, a priori primera opción de la dirección deportiva madridista.
Williams-Goss llegó en enero a Rusia, donde ha promediado 17 puntos y 5,2 asistencias en seis partidos en Eurocup. El jugador de la universidad de Gonzaga se hizo rápido con los mandos del Lokomotiv Kuban, destacando por su capacidad de penetración y desequilibrio con el balón, dejando como elementos secundarios muy a tener en cuenta el lanzamiento desde la larga distancia –50% en tiros de tres en Eurocup– y la dirección de juego.
El buen rendimiento cosechado en esta segunda mitad de temporada hace que el salto a un equipo Euroliga se diera prácticamente por hecho de cara a la próxima temporada. Muchos eran los capos que tenían en su agenda a Williams-Goss, entre ellos un Real Madrid que se mantenía a la espera al tener atado a Thomas Heurtel y encarrilado a Henry, pero los problemas con este último han llevado a dar un paso adelante en la operación, que no resultaría demasiado costosa en términos salariales, al tratarse de un jugador que debe confirmar sus expectativas en la máxima competición continental.