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El karma se la devuelve a Montjuic tras mofarse del Leganés con un cántico ofensivo

Los aficionados del Barcelona corearon "¡a Segunda oé!" ante el Leganés y el Barça acabó perdiendo

Los pepineros lograron un triunfo vital de cara a su lucha por la permanencia en Primera

El Barcelona se desmonta en Liga

El Leganés asaltó Montjuic este domingo y consiguió una victoria histórica ante el Barcelona. Los de Hansi Flick continúan en caída libre y ya han perdido toda la ventaja que tenían con sus perseguidores, empatan a puntos con el Atlético en lo alto de la clasificación. Lo cierto es que los aficionados azulgranas presentes en las gradas se mofaron del conjunto pepinero con un cántico ofensivo, pero la derrota les dejó retratados.

A pesar del tempranero gol de Sergio González (minuto 4), durante el partido en Montjuic se escucharon gritos de «¡a Segunda, oé!», en referencia al Leganés. Desde un sector del estadio corearon este inaceptable cántico a pesar de que el resultado no era favorable para el cuadro local. El Barcelona acabó cayendo por la mínima en casa en el que es el quinto pinchazo en los últimos seis partidos (dos empates y tres derrotas), el segundo seguido en Montjuic tras el de Las Palmas.

Ya van dos derrotas consecutivas como locales ante rivales a priori inferiores a ellos. El karma se lo hizo pagar a los aficionados del Barcelona tras su cántico ofensivo. El Leganés se llevó los tres puntos de un Montjuic vacío, que registró su peor entrada de la temporada con un total de 39.523 espectadores. Es la primera vez este año que la entrada está por debajo de los 40.000.

Tres puntos de oro

Pese a los cánticos desde un sector de Montjuic, el Leganés consiguió una victoria que vale oro de cara a su lucha por la permanencia. Estos tres puntos les colocan con cuatro más que el Espanyol, con un partido menos, que marca los puestos de descenso con 14 puntos. Los pericos reciben al Valencia este miércoles en un duelo directo por la salvación.

El Lega quiere seguir en Primera otro año más y para ello cada punto es oro, porque la salvación va a estar muy apretada. Este triunfo sabe a gloria al cuadro dirigido por Borja Jiménez. Asaltar la casa del líder es algo histórico y para colmo aprietan todavía más la Liga, mientras ellos se distancian de los puestos de descenso y cogen aire.

En esta batalla cada punto cuesta sangre, sudor y lágrimas para conseguirlo, de ahí la alegría del conjunto pepinero y de todo el pueblo madrileño. Nunca en su historia habían ganado al Barcelona y hacerlo en su casa sabe todavía mejor si cabe. Fue un triunfo sufrido, pero que supo a gloria tras el pitido final del árbitro.