Curiosidades
Turismo

Robledillo de Gata, el municipio de Cáceres con mucho encanto para un fin de semana

  • Janire Manzanas
  • Graduada en Marketing y experta en Marketing Digital. Redactora en OK Diario. Experta en curiosidades, mascotas, consumo y Lotería de Navidad.

Si te apetece hacer una escapada de fin de semana con tu familia o amigos, Robledillo de Gata es un destino fantástico. Situado a 120 kilómetros de Cáceres y a 310 kilómetros de Madrid, es un pueblo muy pequeño, de apenas 85 habitantes. Prepárate para hacer un viaje en el tiempo con sus casas de madera y adobe y sus callejuelas empedradas.

El buen estado de conservación de la arquitectura serrana hizo que la localidad fuera declarada Bien de Interés Cultural y Conjunto Histórico-Artístico en 1994. Además, recientemente ha sido nombrado uno de los «Pueblos más bonitos de España». Todos los que visitan Robledillo de Gata sacan la misma conclusión, y es que es un gran museo al aire libre.

¿Qué ver en Robledilla de Gata?

A pesar de su pequeño tamaño, el municipio tiene mucho que ofrecer. Justo al lado de la Ermita del Humilladero hay una plaza para aparcar, así que aquí es donde comienza la ruta de la mayoría de los visitantes.

Olvídate del plano y piérdete por las callejuelas para observar la arquitectura tradicional extremeña en cada rincón. Todas las viviendas tienen varias altas, construidas así para salvar los desniveles propios de una zona de montaña. Hay multitud de pasadizos y túneles que conectan unas callejuelas con otras.

El principal monumento religioso es la Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción, ubicada junto al Ayuntamiento. Su origen se remonta al siglo XVI, y fue edificada sobre los restos de un palacio de la familia Alba. Merece la pena acceder al interior para ver la sacristía con cubierta mudéjar. Además, en Robledillo de Gata hay otros edificios religiosos, como la ermita del Cordero (siglo XVI) o la del Humilladero (XVI).

En la calle principal hay un mirador con unas vistas espectaculares a parte del pueblo y al río Árrago. Una de las visitas más interesantes en el municipio cacereño es el Museo del Aceite, ubicado en el antiguo molino que aprovechaba la fuerza del río para prensar las aceitunas y elaborar aceite. Se conservan muchos de los objetos tradicionales, así como parte de la maquinaria, así que es una oportunidad de oro para conocer la historia del lugar.

Además de disfrutar de la cultura, la historia y la gastronomía, Robledillo de la Gata también es un destino fabuloso para estar en contacto con la naturaleza. En los alrededores del pueblo hay varias rutas de senderismo, algunas de ellas muy cortas y sencillas.