Las mejores pastelerías para disfrutar de las rosquillas de San Isidro, en Madrid
Rosquillas de nata y limón de la abuela
Rosquillas de anís de la abuela, esponjosas y fáciles de hacer
Receta casera de rosquillas de naranja y chocolate negro
Toca prepararse para disfrutar de unas rosquillas de San Isidro, que pueden ser la mejor opción para los amantes del dulce. Detrás de una receta sencilla está una combinación de ingredientes que nos garantizan un café con rosquillas o una sobremesa de esas que no se olviden.
Ante la gran variedad de ofertas que tenemos en nuestro poder, podemos optar a varias alternativas que acabarán siendo las elegidas. En realidad, todas las pastelerías de Madrid pueden ofrecernos estos dulces que queremos, un recuerdo de la celebración, desayuno o merienda que nos acompañará en estos días. Pero, te hemos seleccionado algunas de las mejores en esta lista.
Dónde comprar rosquillas de San Isidro en Madrid
Madrid está de celebración con la fiesta de su patrón, San Isidro. Durante estos días se realizan diversidad de actividades para mayores y pequeños. Así permite descubrir la ciudad de otra manera. Junto a ello no podemos perdernos las cosas típicas que se hacen estos días. Mira las mejores pastelerías para disfrutar de las rosquillas de San Isidro.
Y es que es el mes de las rosquillas (tontas, listas, de Santa Clara, francesas…), porque es precisamente entre esas dos fechas cuando es típico comer alguna de estas especialidades.
Mejores pastelerías para disfrutar de las rosquillas de San Isidro
Levaduramadre Natural Bakery
En este local hay un poco de todo y especifican que hace unos años las rosquillas del Santo perdieron un poco de tirón y muchos dejaron de consumirlas en estas fiestas, pero la tradición ha recuperado el terreno perdido y actualmente hay muchísima gente que nos las pide”, explica Moncho López, su dueño.
Así encontramos las tontas, que reciben el nombre por la simpleza de la receta, se preparan a base de harina, huevos, azúcar, aceite y un poquito de anís y son la base del resto de rosquillas. Las listas tienen, como hemos dicho, la misma base que las tontas, a las que se añade un glaseado de azúcar, huevo y limón que les da un aspecto muy apetecible. Evidentemente son más dulces y jugosas que las anteriores.
Y las de Santa Clara llevan también la base de las tontas pero están cubiertas de un merengue blanco muy vistoso. Se llaman así porque parece ser que fueron las monjas de Santa Clara del Monasterio de la Visitación, las que las inventaron