5 faltas de ortografía comunes en el castellano y cómo evitarlos
El uso correcto del castellano es uno de los grandes retos a los que nos enfrentamos cada día que escribimos. Es una lengua viva que está en continua evolución, añadiendo nuevas palabras al diccionario. Pero otras, que llevan cientos de años con nosotros, son propensas a tener faltas de ortografía. Tras recordaros las reglas de ortografía más importantes, nos hemos querido fijar en las faltas de ortografía que más se cometen. Apúntalas bien para no cometer más faltas.
Por qué, por que, porque y porqué
El primer por qué es la combinación de la preposición por y el interrogativo qué. Se reconoce si se agrega la palabra la palabra razón. Ejemplo: “¿Por qué (razón) no aumenta el número de vivienda protegida?”. Sin embargo, el por que sin tilde es la combinación de por y el pronombre que. Se reconoce de manera sencilla si intercalamos un artículo entre ellos. Ejemplo: “Ese es el motivo por (el) que decidió no ir”.
Por otro lado, porque es una conjunción átona, razón por la que se escribe sin tilde. Se puede utilizar como conjunción causal, para introducir oraciones subordinadas, o como encabezamiento de respuestas. Ejemplo: “No fui a la fiesta porque no tenía ganas».
Porqué es un sustantivo masculino que equivale a causa, motivo o razón. Se escribe con tilde por ser una palabra aguda terminada en vocal. Al ser un sustantivo, suele estar precedido por un artículo. Ejemplo: “No comprendo el porqué de tu actitud”. Aquí puedes leer más ejemplos.
Haber y a ver
Haber puede ser tanto un verbo como un sustantivo. Como bien explica la R.A.E.: “Como verbo, haber se usa como auxiliar, seguido de un participio, para formar los infinitivos compuestos de la conjugación”. Ejemplo “Haber venido antes”. También se puede usar como infinitivo del verbo impersonal, expresando presencia o existencia. Ejemplo: “Parece haber un chico esperándote en la puerta”.
Por otro lado, a ver está formado por la preposición a y el infinitivo verbal ver. Podemos usarla si queremos ver algo o para llamar la atención del interlocutor. Ejemplo: “A ver, ¿has hecho lo que te dije?”. También se usa para generar expectación, como equivalente de “claro” o “naturalmente” o delante de una oración que introduce “si”. Ejemplo: “¡A ver si adivinas lo que estoy pensando!”.
Hay, ahí y ¡ay!
La primera, hay, se refiere al verbo en tercera persona del verbo haber, Para indicar un lugar, el correcto es ahí, pero si queremos expresar angustia o dolor, entonces será la interjección ay. Ejemplo: “Ahí hay un hombre que dice ¡ay!”.
Valla, vaya y baya
Valla es un sustantivo que designa un obstáculo o impedimento. Ejemplo: “La valla limita la zona de juego”. Vaya es relativo al verbo ir, es decir, indica movimiento. Ejemplo: “Vaya a mirar a la otra tienda”. Por último baya es otro sustantivo, que hace referencia al fruto de los matorrales. Ejemplo: “No todas las bayas son comestibles”.
Yendo y llendo
Es un error muy común, pero que tiene fácil solución. Yendo es el gerundio de ir, mientras que llendo no existe. Ejemplo: “Ya estoy yendo a vuestra casa”.
Lo último en Curiosidades
-
Es la villa medieval más bonita de España y está en este pueblo de cuento: lo dice ‘National Geographic’
-
Ni andaluces ni catalanes: a 8 de cada 10 españoles les molestan los ciudadanos de esta comunidad autónoma
-
Ni París ni Bali: estos son los destinos con los billetes más baratos para viajar este mes de agosto
-
Ni todos los días ni una vez por semana: un experto confirma cada cuánto hay que lavarse el pelo en verano
-
Los expertos piden que dejemos de hacer esto en casa en plena ola de calor: es un error garrafal
Últimas noticias
-
Los guardias civiles tienen que poner dinero de su bolsillo para escoltar los caudales del Banco de España
-
Los actores turísticos de Baleares señalan los altos precios como elemento perturbador de la temporada
-
El Gobierno adjudica 484.659 € en contratos a dedo para ‘resucitar’ a Franco a los 50 años de su muerte
-
Baldoví falsea su currículum en las Cortes Valencianas con un título ‘fake’: «Licenciado en Magisterio»
-
El empleo de baja cualificación, en extinción: 2,3 millones de puestos destruidos en la UE antes de la IA