Mallorca: un nuevo estudio científico alerta de la grave degradación de la Bahía de Pollença
Señala como principales factores negativos los vertidos de aguas fecales, el exceso de embarcaciones y la basura
El estudio lo ha realizado la Asociación Arrels Marines por encargo del Ayuntamiento de Pollença
Se propone limitar los fondeos tanto en la Bahía de Pollença como en la de Formentor
Otra emblemática zona turística de Mallorca está contaminada por aguas fecales: la Bahía de Pollença
Un nuevo estudio encargado por el Ayuntamiento de Pollença y realizado por la Asociación Arrels Marines constata la degradación de la Bahía de Pollença por dos factores fundamentales, los vertidos de aguas fecales y el exceso de fondeos. El estudio se ha presentado esta semana y versa sobre el estado del fondo marino de la bahía de Pollença. Arrels Marines es una organización sin ánimo de lucro constituida en 2020 con el objetivo de proteger y preservar la belleza del mar balear mediante la conservación marina, la conciencia ecológica y la educación ambiental.
En el estudios se ha analizado la actividad náutica en la zona interior de la Bahía de Pollença así como sus repercusiones ambientales con cuatro objetivos: evaluar el estado ecológico de la zona interior de la bahía de Pollença; evaluar el impacto ecológico y social de las embarcaciones de recreo; evaluar el impacto de los residuos y las estructuras de fondeo ilegales; y aportar posibles soluciones compatibles con la realidad de la zona.
El trabajo de diagnóstico llevado a cabo por el equipo científico de la asociación ha consistido en realizar una serie de inmersiones en la bahía de Pollença, para contabilizar el número de fondeos y estructuras que utilizan las embarcaciones que fondean en la bahía. Durante las inmersiones se han efectuado distintos transectos, que han cubierto una superficie de estudio de 12.400 metros cuadrados.
Impactos principales
El estudio identifica cinco impactos principales en la zona de estudio: vertidos y filtraciones de aguas residuales; sustitución y reposición de arena; baja movilidad oceanográfica; exceso de fondeos y presión náutica; exceso de basura y de muertos [bloques de hormigón a los que se sujeta la embarcación].
En total, se hallaron sesenta y dos muertos en un área de 12.400 metros cuadrados, lo que, extrapolado al área total de la zona de estudio (475.000 metros cuadrados), indica que podría llegar a haber unas 2.375 estructuras de fondeo.
El estudio concluye en primer lugar que la zona interior de la bahía de Pollença se encuentra en el límite de la carga ecológica por presión de embarcaciones. Se afirma también que «la zona de estudio está llena de residuos voluminosos, preferentemente estructuras utilizadas para el fondeo permanente. Se calcula que podría haber entre 1.662 y 2.375, valores que podrían incrementarse con el tiempo debido al constante aumento del sector náutico.
Otra conclusión es que el mal estado de conservación por exceso de embarcaciones no sólo conduce a un deterioro ecológico de la zona, sino que, además, produce desavenencias sociales y económicas. La mayor parte de la bahía ha sufrido una modificación de los sedimentos, presentando un sustrato mayoritariamente fangoso con poca capacidad resiliente para la regeneración del hábitat.
El impacto ecológico provocado por esta situación, sumado a la problemática social que genera, insta a la recuperación ambiental y la mejora de la regulación y debe adecuarse a la capacidad de carga física actual del ecosistema. Una mejora de la gestión de los fondeos y explotación de la zona de estudio posibilitaría una disminución de los impactos sobre el medio (comunidad bentónica y calidad del agua) y una mejora de la seguridad de la navegación y el baño.
Para mitigar los impactos, los autores del informe proponen: eliminar embarcaciones fondeadas de forma permanente y poner en marcha un parque de fondeos ecológicos; limpiar el fondo de los distintos residuos marinos (estructuras de fondeo ilegales); vigilar la zona de forma activa para hacer cumplir las leyes de seguridad y ecología marítima; regular o limitar la velocidad de las embarcaciones en la zona dada la poca profundidad; no verter más arena no biogénica en las playas de Albercuix ni en zonas adyacentes sin estudios previos de impacto ambiental.
También se propone realizar un seguimiento periódico de la evolución ambiental de la zona de estudio, prolongado en el tiempo, para tener monitorizada la zona y crear un plan de gestión y vigilancia para hacer cumplir las leyes y minimizar los impactos existentes en la zona.
El informe constata que en Formentor los impactos de las anclas sobre la pradera de posidonia pueden apreciarse a simple vista. Por este motivo, el Ayuntamiento de Pollença reclama a la Demarcación de Costas de las Islas Baleares que se vuelvan a colocar las boyas en la bahía de Formentor para evitar los fondeos de embarcaciones.
Temas:
- Contaminación
- Mallorca
- Mar
Lo último en OkBaleares
-
La Guardia Civil apunta al exceso de velocidad como causa del accidente de Menorca con seis fallecidos
-
Antonio Ruiz: «El Paseo Marítimo debe ser un lugar con comercios de alto nivel»
-
Una historia de éxito colectivo
-
Antonio Ruiz: «Sigue habiendo locales del Paseo Marítimo que no cierran ni a las 5 de la mañana»
-
El fútbol español alucina con el esperpento arbitral de Las Palmas
Últimas noticias
-
Adara Molinero se sincera, como nunca, sobre el trastorno que le han diagnosticado: «No soy tonta»
-
La evolución de la bandera de España: historia y significado
-
Jorge Javier Vázquez se sincera sobre su problema con la bebida: «No concebía una vida sin alcohol»
-
Jannik Sinner, el rey de la velocidad
-
Fernando Alonso: «Quiero intimidar a Verstappen para cambiar la historia»