Juli Fuster «no le dio más importancia» a que la UCO pidiera el expediente de las mascarillas
"Visto el alcance igual sí que tenía que haberlo comentado" a miembros del Govern
Asegura que nunca intervino en las compras ni en las adjudicaciones de contratos
El ex director general del IB-Salut, Juli Fuster, ha asegurado en la comisión del Parlament que investiga la compra de 1,4 millones de mascarillas por el Govern de Francina Armengol a la empresa de la trama Koldo por 3,7 millones de euros en abril de 2020 que «no le dio más importancia» a que la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil se personara en las oficinas del IB-Salud el verano de 2022 y exigiera copia del expediente de compra del referido material sanitario a la empresa Soluciones de Gestión.
«Ahora», ha reconocido, «visto el alcance igual sí que tenía que haberlo comentado» a miembros del Govern, ha indicado Fuster.
Esta mañana y en relación a esta reclamación del expediente de compra por parte de la Guardia Civil de las falsas mascarillas a instancias de la Fiscalía en el verano de 2022, también la ex presidenta del Govern, Francina Armengol, en su comparecencia en esta misma comisión, ha situado este episodio en «la normalidad» insistiendo en que «no sabía nada» ni fue informada de aquel episodio, que al parecer de estos dos testimonios, no extrañó a nadie en el anterior Ejecutivo.
El alto cargo socialista, por su parte, ha defendido que los 1,4 millones de mascarillas que se compraron en los primeros meses de la pandemia de coronavirus a Soluciones de Gestión, investigada por la Audiencia Nacional, eran para uso civil o extrahospitalario y con el objetivo de tener estocaje de seguridad para la desescalada.
«El stock de material de protección empezó a bajar de manera vertiginosa y nuestros proveedores habituales eran incapaces de suministrar material», ha argumentado durante su comparecencia en la comisión.
El que fuera máximo responsable del IB- Salut ha asegurado, por otra parte, que nunca intervino en las compras y las adjudicaciones ordinarias o extraordinarios y lo ha hecho resaltando «la confianza que tenía en su equipo».
También ha subrayado que nunca habló con proveedores o «facilitadores» ni con Koldo García ni con el exministro José Luis Ábalos y que tampoco recibió presiones para interceder en favor de alguna empresa.
El portavoz socialista en la comisión, Iago Negueruela, ha pedido a PP y Vox que «paren de lanzar bulos» y ha criticado el, a su juicio, surrealismo que ha alcanzado la comisión. «Solo les falta preguntar a Fuster si participó u ordenó la construcción de la estrella de la muerte», ha señalado el socialista.
La presidenta de la comisión, María José Verdú, de Vox, ha tenido que pedir en varias ocasiones a Iago Negueruela que interactuara con el compareciente, en lugar de dirigirse al resto de diputados y, en concreto a los parlamentarios de PP y Vox.
El socialista se ha dirigido en particular a la diputada de Vox Patricia de las Heras, a quien ha pedido que deje de sostener que hubo parte de las mascarillas objeto de investigación que se habían repartido, cuando ha podido comprobar que están en los almacenes. De las Heras había asegurado antes que el diputado socialista le había perseguido por los pasillos del Parlament para increparle.
En otro momento de la comisión, Negueruela ha criticado que la mesa haya rechazado informes de la Intervención que avalan que la compra se hizo correctamente.
Fuster ha subrayado que el que fuera director general de Presupuestos del IbSalut, Manuel Palomino, y el antiguo subdirector de Compras, Antoni Mascaró, así como otros técnicos que han comparecido, ya han aclarado la calidad de las mascarillas.
El portavoz del PP en la comisión, José Luis Mateo, ha lamentado que se sabe qué se compró pero no qué se recibió. «Lo que sí que sabemos es que tenemos 1,5 millones de mascarillas que se dejaron caducar y con una investigación iniciada por la UCO en la Audiencia Nacional y en la Fiscalía europea», ha concluido el ‘popular’.