Andalucía
Vox Sevilla

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Vox Sevilla vuelve a denunciar el deplorable estado en el que se encuentra la capital hispalense, completamente abandonada por el gobierno socialista de Antonio Muñoz. Como buena muestra de esta dejadez, la portavoz del grupo municipal de Vox en el Ayuntamiento de Sevilla, Cristina Peláez, ha denunciado la okupación por parte de un grupo de anarquistas de un edificio de propiedad municipal en Miraflores y ha exigido al alcalde que actúe cuanto antes.

Peláez, a las puertas del edificio okupado en Sevilla, ha asegurado que “en los últimos días un grupo de anarquistas ha decidido utilizar la patada en la puerta como efectivo método para convertir este local en su residencia, que ha sido marcado ya con el reconocible y siniestro símbolo de los anarquistas. Los okupas vuelven a campar a sus anchas por Sevilla, ahora usurpando un local propiedad del Ayuntamiento de Sevilla, es decir, de todos los sevillanos” al tiempo que ha recordado que se trata de un local “expropiado por el Ayuntamiento en su día, a su legítimo propietario, con la intención de convertirlo en un espacio público para los vecinos de la zona”

La portavoz municipal de Vox, junto al concejal Gonzalo Polavieja, ha advertido de que estamos “ante un cambio cualitativo porque en esta ocasión estamos ante un caso con evidentes tintes políticos, que amenaza seriamente la convivencia en Sevilla en general y en este barrio en particular. Los antisistema quieren una Sevilla a la imagen y semejanza de la Barcelona de Ada Colau, donde el anarquismo okupa edificios públicos con la complicidad de las autoridades políticas. En Sevilla no lo vamos a permitir, aunque esos mismos antisistema ocupen concejalías en este Ayuntamiento y sostengan con sus votos al PSOE de Antonio Muñoz”.

Exigimos al alcalde que actúe con contundencia y que lo haga ya, antes de que sea demasiado tarde. Este local, propiedad de todos los sevillanos, debe ser desalojado de inmediato, pero mucho nos tememos que Muñoz y su equipo de Gobierno no hará nada porque su Gobierno se sostiene gracias, precisamente, a los que se esconden tras este símbolo de la Anarquia. Sevilla necesita un Gobierno fuerte y decidido a acabar con estas prácticas, dispuesto a recuperar para todos los sevillanos sus edificios públicos, sus calles, plazas y barrios”.

Cristina Peláez ha advertido que “de no producirse un desalojo inmediato, podemos imaginar lo que está por venir y lo que van a sufrir los vecinos de esta zona, porque sabemos lo que ocurre en aquellas ciudades, como Barcelona, donde sufren este tipo de okupaciones por anarquistas convertidas además en refugio de delincuentes. Conflictos con los vecinos, incremento de la inseguridad, del tráfico de drogas, choques con las fuerzas de seguridad del estado, depreciación del precio de las viviendas y retroceso en la calidad de los servicios públicos.