Piden 12 años de cárcel por violar a su ex pareja tras drogarla en una cena en Málaga
La mujer había roto la relación una semana antes


La Fiscalía de Málaga ha solicitado una pena de 12 años de prisión para un hombre acusado de violar a su ex pareja tras quedar a cenar con ella y administrarle droga en la bebida. La mujer perdió el conocimiento y dio positivo en el análisis toxicológico realizado en el hospital.
Los hechos tuvieron lugar en mayo de 2018, en la vivienda de la mujer, situada en Málaga capital. Según las conclusiones iniciales del fiscal, el hombre fue a casa de su ex pareja, que había roto la relación nueve días antes, y durante la cena, «con ánimo de coartar la libertad sexual» de la víctima, le echó benzodiacepinas en la bebida. Estos medicamentos psicotrópicos tienen efectos sedantes, hipnóticos, ansiolíticos, antiepilépticos, amnésicos y miorrelajantes.
La sustancia anuló la «capacidad volitiva e intelectiva» de la mujer y el hombre aprovechó para cometer la presunta violación. Según el escrito provisional de la Fiscalía, la agredió sexualmente, le practicó tocamientos y le hizo un chupetón en el cuello, todo ello mientras la víctima estaba inconsciente. Al día siguiente, la mujer aún seguía «desorientada y sin poder hablar», así que su hermana la llevó al hospital. Los análisis arrojaron un resultado positivo en benzodiacepinas y la víctima denunció los hechos.
El Ministerio Público califica los hechos como un delito de agresión sexual y pide que se condene al hombre a una pena de 12 años de prisión. También reclama una orden de alejamiento sobre la mujer por tiempo de 15 años y el pago de una indemnización de 21.000 euros, más 120 euros por las lesiones.
Sumisión química
En octubre pasado, en el marco de unas jornadas contra la violencia sexual, la subdelegada del Gobierno en Huelva, María José Rico, pidió «mayor credibilidad» para las mujeres que sufren agresiones sexuales con sumisión química.
El Instituto Nacional de Toxicología y Ciencias Forenses recoge un preocupante aumento del 75% de este tipo de casos en España, pasando de las 950 agresiones sexuales con sospecha de sumisión química bajo investigación judicial registradas en 2021 a los 1.648 casos en 2022. El 93% de las víctimas son mujeres y el 60% tiene entre 18 y 34 años.
En el transcurso de estas jornadas, las ponentes insistieron en la importancia de que las víctimas, a la menor sospecha de agresión sexual con sumisión química, «pidan ayuda y acudan a los servicios de urgencias o emergencias, dado que las primeras 24 horas son clave para poder detectar la sustancia empleada».
Los expertos señalaron precisamente las benzodiacepinas como la sustancia de comercio legal en España más utilizada para la comisión de este tipo de delitos sexuales, con presentaciones farmacéuticas como el Alprazolam o el Valium, sustancias depresoras del sistema nervioso central. Su uso más común es mezclado con alcohol. También se mencionaron otras sustancias como el GHB (éxtasis líquido) o la ketamina.
El caso más notorio de sumisión química es el de la francesa Gisèle Pelicot, que fue drogada durante años por su marido para que decenas de hombres la violaran sin su conocimiento.