Andalucía
Málaga

El derrame de fluidos de un cadáver obliga a cerrar al público el cementerio de Torremolinos

El ayuntamiento ha ordenado aislar el nicho para solventar la situación de insalubridad

Un problema de hermetismo en el ataúd, origen del incidente

El Ayuntamiento de Torremolinos (Málaga) ha ordenado el cierre al público de los nichos y el osario del cementerio municipal para solventar una situación de insalubridad originada por un problema de hermetismo de un ataúd y su consiguiente fuga de fluidos, según ha informado el gobierno local.

El incidente se detectó el pasado 2 de agosto, cuando comenzó el derrame de fluidos de un cadáver en el interior de un féretro, según detalla SUR. Tres días después, la mancha ya se había extendido por buena parte del nicho hasta llegar al suelo y había empezado a calar otros ataúdes próximos.

Debido al problema con el féretro y al fuerte olor en esa zona del cementerio, el gobierno municipal se vio forzado a tomar medidas de seguridad y el pasado día 6 ordenó el cierre provisional tanto de los nichos como del osario, quedando únicamente abiertas las salas de velatorio y las dependencias anexas. El Ayuntamiento de Torremolinos ha contactado con la familia del fallecido para informar de la situación y buscar una solución consensuada.

Tras aislar el nicho afectado, los operarios municipales están llevando a cabo actuaciones en materia de limpieza para garantizar la normalidad del camposanto. El citado medio señala que tratarán de frenar el derrame empleando un serrín profesional para la absorción de fluidos.

Aunque el incidente nace del proceso natural de descomposición de un cadáver, en el que se producen pequeñas explosiones de fluidos a consecuencia de la liberación de los gases del cuerpo, no es habitual que éstos emanen fuera del féretro. Para evitar que esto suceda, los nichos cuentan con una suerte de desagüe para que los líquidos desprendidos se filtren a la tierra y no contaminen otras tumbas. Al parecer, el deficiente sellado del citado ataúd ha desencadenado la fuga, aunque se sospecha que también ha podido influir el calor.

La previsión del Ayuntamiento es que los nichos y el osario vuelvan a abrir el próximo lunes 12 de agosto, una vez se solucione la situación. Entretanto, los operarios municipales procederán a secar y aislar los gases y a realizar un sellado superficial del féretro.