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10 beneficios de andar

Para las personas de una cierta edad o que no tengan un físico muy adecuado para ejercitarse con gran intensidad, siempre se les recomienda andar. Para quemar el exceso de calorías es preciso caminar a gran ritmo, ya que de esta manera ejercitaremos los músculos y al requerir más energía se consumirán más calorías. Te recordamos los 10 beneficios de andar.

  1. Fortalece el corazón: caminar al menos media hora todos los días reduce el riesgo de padecer enfermedades cardíacas y lesiones cerebrovasculares. Además reduce los niveles de colesterol malo.
  2. Disminuye el riesgo de enfermedades: reduce el riesgo de padecer diabetes tipo 2, algunos tipos de cáncer y asma. Los que practican deporte cuentan con un 20% menos de posibilidades de desarrollar tumores de mama y de colon.
  3. Nos mantiene en el peso adecuado: a medida que vayamos incrementando la velocidad de la marcha conseguiremos quemar más calorías. También nos ayuda a incrementar el tono muscular.
  4. Ayuda en la prevención de la demencia: el ejercicio cuenta con un efecto protector sobre la función del cerebro. Una buena solución para mantener en buen estado la memoria.
  5. Colabora en la prevención de la osteoporosis: fortalece los huesos, incrementando la densidad ósea. Esto resulta muy importante sobre todo en las mujeres.
  6. Tonifica glúteos y piernas: conseguiremos darle definición a las pantorrillas, isquiotibiales y cuádriceps.
  7. Tonifica los brazos: los brazos nos darán impulso a la hora de andar. Hay que llevarlos doblados a la altura del codo y moverlos hacia atrás y hacia adelante.
  8. Incrementa los niveles de energía: conseguirá aumentar la circulación y el suministro de oxígeno a cada célula del cuerpo. Alivia también la tensión muscular y libera la rigidez en las articulaciones.
  9. Aumenta los niveles de vitamina D: sobre todo si caminos a la luz del día. La exposición a la luz solar nos permitirá conseguir esta vitamina.
  10. Conseguiremos un mayor bienestar: nos sentiremos mucho más animados gracias a la práctica de ejercicio.

Si el mal tiempo te lo impide, siempre puedes optar por utilizar una cinta de andar.