¿La España vacía vota a Vox?

Las elecciones del domingo que viene en la comunidad autónoma de León y Castilla la Vieja son las primeras en las que el tema central de discusión ha sido el reto demográfico de las zonas deshabitadas, situándose la despoblación como el principal problema en las preocupaciones de los ciudadanos según las encuestas. A esta centralidad de lo rural en el debate han contribuido tanto el ministro líder de IU cuestionando la calidad de la carne producida en España, como las plataformas sociales que (previa elaboración de intelectuales) reivindican la llamada España vacía (da), las cuales se han lanzado a competir con una agrupación de electores denominada “España vaciada” (EV).

Con todo, los datos que han ido ofreciendo las encuestas permiten entrever algún detalle sociológico sorprendente. Así, el retrato robot del votante de EV es el de un ex votante del PSOE o Ciudadanos residente en núcleos urbanos. Alguien dijo hace tiempo que “eso de la España vacía es una memez de progres de ciudad”. Parece que los primeros estudios sociológicos lo confirman. Pero entonces, ¿a quién vota la gente de la España vacía?

Creo que para encontrar una respuesta podemos empezar por tomar algún ejemplo concreto de nuestro debate público reciente. Por ejemplo, el pasado fin de semana se celebraron varias manifestaciones de protesta contra el uso de los perros en la caza. El manifestante medio de las mismas es un votante muy concienciado con el bienestar animal (salvo que sea una mascota urbanita, en cuyo caso justifican desde tenerles prisioneros fuera de un hábitat natural hasta la mutilación genital para el sosiego de la mascota). Y por eso, además de oponerse a los perros de caza, se opone a la cría intensiva de cerdos (incluso asumiendo algunos la abstinencia de carne), a la lidia de toros o la eliminación de lobos y jabalíes. Por el contrario, el votante de la España vacía tiene claro que los animales pueden quererse y cuidarse sin dejar de hacerles prestar una utilidad, y saben que a veces hay que eliminar especies depredadoras (si los lobos en lugar de ovejas se comieran caniches y gatos domésticos, ya veríamos la posición animalista al respecto).

Por otra parte, siendo las reclamaciones de la “España abandonada” contraculturales en muchos aspectos, el votante rural necesita un partido capaz de transgredir la corrección política y la agenda globalista/climática. Un partido que moleste realmente al poder. Y creo que ha quedado demostrado que “Teruel existe” sustentando al Gobierno de coalición PSOE-Podemos molesta poco a la izquierda hegemónica y casi nada al poder fáctico nacional e internacional. Un nivel cero de molestia que es el mismo que son capaces de producir las candidaturas de EV dispuestas a apoyar un gobierno progre en Castilla y León.

Así las cosas, el voto protesta más efectivo, y que mejor conecta con el sentir de la España vacía me temo que es Vox. La sorpresa del domingo podría venir por ahí: por la constatación de que la España vacía ha votado Vox. Atentos al aparato, porque parece que a los intelectuales del sistema la memez de la España vacía se les puede volver en contra.