¿Puedo llevar a mi gato a la playa?

En nuestras vacaciones, muchas veces nuestro plan es irnos a las costas para disfrutar de la playa. Y como no queremos dejar nuestro gato con alguien, preferimos llevarlo con nosotros. De esa manera podemos compartir tiempo y actividades con ellos. Ahora bien, debido a que los gatos son animales muy nerviosos, ¿es saludable llevar nuestro gato a la playa? A continuación, veremos ciertos consejos que debemos tomar en cuenta al momento de llevar a nuestro gato a la playa.

Cambios repentinos

Los gatos son animales que sufren estrés y nerviosismo por los cambios repentinos de lugar. Si lo vamos a llevar a la playa, el animal posiblemente se estrese, ya que no controla su entorno. Siempre es recomendable que, para viajes cortos, evitemos llevarlo. En caso de que sea un viaje largo, y no queramos dejarlo con alguien, lo mejor es llevarlo en jaula o trasportín. Debemos asegurarnos que en esa jaula lleve sus juguetes favoritos; de esa manera los cambios se le harán menos agobiantes.

Alimentación

Otra situación que debemos tener en cuenta tiene que ser la alimentación. Debemos mantener la misma dieta y rutina de alimentación. Su adaptación al cambio de clima y de ambiente será mucho menos traumático; es muy positivo llevar su plato de comida y de agua, y colocarlo en un espacio tranquilo de donde nos hospedamos.

Vigilarlo

Sabiendo que los gatos son animales bastante sigilosos, y que buscan moverse por todos los rincones del hogar; para que nuestro gato no se escape o se pierda, lo mejor es informarnos de dónde nos vamos a quedar. Hay que saber si hay terraza o ventanas abiertas, también es recomendable colocarle al gato un collar con identificación de sus dueños. De esta manera, en caso de que se nos pierda, la persona que lo consiga nos pueda contactar.

Cuidar su pelaje

Cuando llevemos a nuestro gato a la playa debemos cuidar su pelaje cepillándolo. Si exponemos a nuestros felinos a calores intensos como en la playa, su pelo corre riesgo de caerse. Al cepillarlo vamos a quitarle todo el pelaje muerto. Otra recomendación es que le pasemos un guante húmedo para que el gato se refresque.

Colocar protección

Entre las cosas de las que debemos estar pendiente de nuestro gato está su piel. Lo recomendable es no exponerlo al sol mucho tiempo. Eso quiere decir que, en las horas más calurosas del mediodía, lo mejor es colocarlo en la sombra. Pondremos protector solar en la punta de sus orejas y en la nariz para que no sufra después quemaduras.

Nuestros felinos son animales que necesitan controlar su entorno. Por ello, cada vez que lo llevemos a cualquier sitio, debemos entender que esto le puede estresar. Lo que debemos hacer es acondicionar el lugar, para que no le de nerviosismo este cambio intenso de ambiente.