Por fin un futuro sin miedo para Terelu Campos

Terelu Campos está feliz, pletórica y muy relajada. Si hasta hoy tenía motivos de sobra para sonreír tras publicar su primer libro autobiográfico y ver cómo su madre está felizmente recuperada del ictus isquémico que sufrió, una nueva noticia, la más importante que podría anunciar a nivel personal, la colma de felicidad. ¡Está completamente curada del cáncer que le diagnosticaron en 2012! Se trata, sin duda, del broche de oro a un año agridulce y de la antesala para un verano fantástico. Ella misma lo explica en una reveladora y sincera entrevista: «Por fin ha llegado el día, que me parecía tan lejano, en el que mi oncólogo me ha dicho que está todo bien y me ha retirado el tratamiento del cáncer. Estoy curada».

La hija de María Teresa Campos no puede ocultar su inmensa alegría al igual que tampoco pudo soslayar la angustia cuando iba de camino a la cita médica. «Iba muy angustiada. Desde enero hasta hace unos días he pasado los peores meses de estos cinco años. He vivido en un estado de angustia permanente y espantoso. Creía que el doctor me iba a comunicar que tenía que hacerme otra nueva prueba. Cuando me dio la noticia no podía dejar de llorar», ha asegurado Terelu en la revista HOLA.

Sin embargo, todavía subsiste una desazón en su interior, ¿cómo va a reaccionar su cuerpo a partir de ahora? «He estado cinco años medicándome y de repente me retiran la medicación, tengo miedo de que mi cuerpo no responda», ha manifestado la presentadora malagueña. Igual que en su día compartió con el público la peor de las noticias, la de su cáncer, hoy ha hecho lo propio anunciando la buena nueva.

¿Qué considera Terelu que ha dejado atrás en estos años de contienda con su salud? «He dejado autoestima en el camino, mucha autoestima, y es eso es lo que estoy intentando recuperar, pero no ahora; desde hace mucho tiempo. Lo que sí puedo decir que he tachado para siempre de mi lista de obsesiones es el miedo».

De esta lucha, apostilla la colaboradora, ha salido a hombros gracias a su madre y a su hermana, Carmen Borrego, quien le ha realizado la entrevista. «Sin ti y sin mamá no creo que lo hubiera conseguido. Habéis dado la talla de sobra. Tampoco me olvido de mi hija, con su silencio y resignación, y de Carlos Pombo, que fue un apoyo fundamental», ha querido agradecer la hija mayor de Teresa Campos.

En el futuro solo ve esperanza y ganas por mejorar en todo. ¿Lo que más le preocupa a Terelu Campos? La mayoría de edad de su hija: «Me enfrento a lo que pueda suponer para ella ser mi hija, estar en el foco de atención. No sé si ella participará o no de mi vida pública. Es una decisión que debe tomar ella».

¿Y dónde queda el amor y el estado de su corazón? «Mi corazón está tranquilo, más bien apático, y no desea cambiar de estado ahora mismo. Él no tiene ansiedad por estar operativo. No encontrar a nadie con el que compartir mi vida, que nadie que realmente me gusta se cruce en mi camino, eso sí me lo he llevado a plantear en los últimos tiempos. Tengo a veces la necesidad del afecto de un hombre». De sexo no tiene ganas y el hombre perfecto no existe para ella.

¿Cómo valora el paso de Edmundo por ‘Supervivientes’?

De Edmundo Arrocet asume haber tenido hasta hace poco un gran desconocimiento: «Tampoco diría yo voluntario, sino por las circunstancias de la vida. Si a lo mejor Teresa se hubiera unido a Edmundo cuando tenía treinta años hubiera sido diferente. Sin embargo ellos se unen en una etapa de su vida mucho más tranquila, quieren descanso, tranquilidad y nada de alboroto».

Esa vertiente ‘casera’ que mantiene la pareja provocó que no se diera a conocer demasiado el cómico. ¿Cómo valora su paso por ‘Supervivientes’? «Lo único bueno que saco es haber conocido mejor a Edmundo, pero el concurso me ha provocado mucho sufrimiento». ¿Sonarán campanas de boda para Teresa y Edmundo? Terelu lo tiene claro: «Yo no creo que vayamos de boda, en absoluto».