Granitos en las ingles: ¿cómo se pueden evitar?

Los granitos en las ingles pueden aparecer por muchos motivos, y lo cierto es que son muy molestos, especialmente si producen algún picor o dolor cuando se rozan con la ropa. Por suerte, esos granitos se pueden evitar, y hoy te contaremos algunas maneras de hacerlo.

Tipos de granos en las ingles

No todos los granitos que pueden aparecer en las ingles son iguales, conviene saber diferenciarlos para encontrar su origen y tratarlos. Estos son los más habituales:

• Grano: es de color rojo y suele producirse por inflamación o infección en la glándula sebácea de la piel.
• Ampolla: es una bolsita que contiene líquido seroso y está causada por quemaduras, roces o enfermedades de la piel.
• Verruga: esta pequeña prominencia aparece a causa de la dilatación de terminaciones vasculares y el posterior endurecimiento de la piel.
• Quiste: es un pequeño bulto que se forma con grasa.

Consejos para evitarlos granitos en las ingles

• Sigue una dieta equilibrada que sea baja en grasas, lo cual disminuirá el depósito de sebo en las glándulas epidérmicas.
• Tu hidratación debe ser siempre óptima, así que bebe dos litros al día. No tienen por qué ser dos litros de agua, puedes combinar varias bebidas hasta llegar a los dos litros, pero deben ser bebidas saludables.
• Ten cuidado con las cremas y demás productos que utilizas en la zona de las ingles, y aplícalos con moderación ya que un exceso puede hacer aún más daño que no poner nada.
• Mantén la zona de las ingles seca siempre que puedas, ya que la humedad hace que proliferen hongos y bacterias. Seca a fondo tras la ducha, la playa, la piscina, etc.
• Utiliza prendas naturales y ropa que no sea muy ajustada, que no quede apretada en esa zona.
• El estrés y la ansiedad pueden causar alteraciones en la piel, incluyendo granitos en las ingles, así que trata de manejar esas situaciones para evitarlas.

¿Que NO debes hacer si tienes granitos en las ingles?

• Evita utilizar en las ingles jabones abrasivos y alcalinos ya que resecan la piel y favorecen que aparezcan los granitos.
• No te estés tocando los granos, ni mucho menos intentes explotarlos o quitarlos. Pueden infectarse y su curación se complicaría.
• No utilices cremas u otros productos que sean demasiado grasas.