Internacional

Putin acude al rescate de Maduro y acuerda la explotación conjunta de dos yacimientos de gas

Putin acude en auxilio de Maduro, aprovechando la necesidad de un país, Venezuela, sumido en una enorme crisis económica y de abastecimiento, tras el desplome del precio del petróleo y el hundimiento de la confianza en sus instituciones. La petrolera rusa Rosneft está presta a firmar un gran acuerdo para la explotación de dos yacimientos de gas en el noreste del país caribeño con Petróleos de Venezuela (PDSVSA), la compañía estatal de hidrocarburos. Ambas firmas estatales constituirán una empresa conjunta al 50% que, asimismo, construirá una planta de refinado y licuado del gas, para su distribución.

Así lo ha anunciado este sábado el presidente de la compañía venezolana, Eulogio del Pino, desde el Foro Económico Internacional de San Petersburgo (Rusia). Según ha dicho Del Pino, ambos Putin y Maduro están cerca de cerrar la firma del acuerdo, el cual comprenderá la explotación de los campos de Mejillones y Patao, que forman parte del proyecto Mariscal Sucre.

El propio director ejecutivo de Rosneft, Ígor Sechin, viajará a Venezuela el próximo mes de julio para la firma del acuerdo que puede servir para darle un balón de oxígeno a la dictadura bolivariana, necesitada de ingresos, gracias a la ayuda de un gigante internacional controlado por el Kremlin que, así, vuelve a utilizar la política energética como parte de sus relaciones internacionales.

La empresa conjunta que ambas compañías constituirán para la explotación de estos yacimientos prevé producir hasta 300 millones de metros cúbicos de gas al día con el objetivo de distribuirlos en el mercado latinoamericano, en forma licuada. 

«Estamos muy cerca de firmar un acuerdo sobre un gran proyecto de cooperación para la extracción de gas en aguas venezolanas, en el campo del Mariscal Sucre», ha anunciado Eulogio del Pino.

Los ingresos, en otoño

El objetivo del dictador Nicolás Maduro es llegar ‘vivo’ a otoño, para empezar a ver llegar el dinero procedente de este nuevo proyecto. «Dentro de tres o cuatro meses, prevemos iniciar la producción de gas. La idea es producir gas para la exportación y para el consumo doméstico en Venezuela, de la mano de Rosneft», ha agregado el presidente de PDVSA. «Rusia y Venezuela están muy contentas por esta cooperación», ha concluido.

El derrumbe de los precios del petróleo ha sido la clave por la que el Gobierno chavista no ha sido capaz de controlar a la población descontenta y empobrecida como hasta ahora, desde el inicio de la llamada Revolución Bolivariana. La caída desde los 140 hasta los 40 dólares por barril en poco más de un año ha reducido los ingresos del Estado, dependientes en un 96% de la exportación de crudo.

Sólo el pasado mes de enero las cifras eran mareantes. La falta de previsión de Nicolás Maduro ha llevado a que el ingreso de divisas por concepto de venta petrolera en el primer mes de 2016 presentó la pírrica cifra de 77 millones de dólares. En 2010, en el mismo mes las divisas que recibía el Estado venezolano alcanzaban los 3.317 millones de dólares, una caída superior a 4.200% en seis años.

Preguntado por crisis de los precios del ‘oro negro’, Eulogio del Pino afirmó: «Estimamos que el precio del petróleo se mantendrá en 50 a 60 de dólares por barril durante el verano». Esa cantidad mantiene a Venezuela en quiebra y Maduro necesitaba una inyección urgente, tanto de dinero como de legitimidad internacional. Y es ahí donde Vladimir Putin ha encontrado una puerta entreabierta para ampliar su influencia en la región.

«Si [los países productores de petróleo] no emprendemos algunas medidas, los precios volverán a caer a alrededor de 20 de dólares. Necesitaremos una vez más ‘congelar’ la producción, pero entonces puede que sea demasiado tarde», subrayó. Entretanto, la diversificación puede ser un primer paso para insuflar aire a la dictadura chavista y unos billetes con los que volver a comprar voluntades a través de subvenciones y regalías.