Cómo hacer una mesa con una máquina de coser

Hacer una mesa con una máquina de coser es una forma de reciclar y de crear objetos con alma. Este tipo de piezas tienen una estética retro realmente preciosa, una herramienta de trabajo que estaba en casi todos los hogares. Con esas viejas máquinas de coser las abuelas y madres de más de una generación eran capaces de hacer maravillas. Podían hacer el dobladillo de unos pantalones, crear disfraces para carnaval o hacerse vestidos increíbles, todo era posible en ese objeto mágico. Toma nota de cómo mantener viva esa esencia, atrévete a hacer una mesa con una máquina de coser.

Pasos para hacer una mesa con una máquina de coser

1. Esta pieza tan especial la podemos encontrar en casas antiguas o en algún rastrillo, poniendo un anuncio puede parecer esa máquina de coser que necesitamos. La parte de debajo de estas máquinas tiene una superficie metálica, la vamos a cubrir para que no se oxide y nos aporte de esta manera sus mejores propiedades. Las patas son el elemento estrella de esta mesa que se reconocerá a simple vista.
2. Lijamos esta estructura de metal y le aplicaremos un poco de antioxidante, con una buena mano dejaremos esta parte como nueva. Antes eliminaremos los restos de la lija y nos aseguramos de que cubrimos correctamente el antioxidante.
3. Retiramos la parte superior de la máquina de coser. Nos quedaremos solo con las patas que tenemos listas y preparada con una buena capa de esmalte. Nos faltará crear la superficie que será la que corone este proyecto y lo convierta en mesa. Usaremos una plancha de madera, le pasamos una lija de grano fino y la barnizamos.
4. Este tipo de mesas pueden quedar muy bien en exteriores, le aplicaremos un berniz que nos permita sacar nuestra mesa al jardín y tenerla siempre preparada para la acción. Una mesa para las bebidas o el desayuno perfecta,
5. Cuando el barniz y el esmalte, en el caso que queramos darle una nueva capa para que quede más brillante, estén secos, podemos colocar la encimera. Fijamos la pieza de madera con tirafondos a la superficie de la máquina de coser que habremos retirado previamente. Solo nos quedará situar esta mesa en el lugar adecuado para poder disfrutarla mientras recordamos viejos tiempos.

Atrévete con esta sencilla manualidad y crea una mesa de las que nunca se olvidan, el resultado te impresionará. Recuerda esos días de lluvia al lado de una mesa de coser, recrea su ruido y disfruta del pasado de una forma muy especial.